Un caso insólito: un bebé con una carga viral 51.000 veces mayor que la media

r. r. REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

MONICA IRAGO

El recién nacido, tratado en un hospital de Estados Unidos, presentaba una variante del virus que no se había descrito con anterioridad

26 feb 2021 . Actualizado a las 09:32 h.

Los niños y los jóvenes están más protegidos frente al covid-19 que los adultos. Es lo que ha enseñado un año de pandemia. Pero frente a la teoría general pueden existir excepciones. Y la más singular es la que se ha encontrado en un recién nacido en el Hospital Nacional de Niños de Washington, que presentaba una carga viral absolutamente inusual: el bebé nació con una carga viral 51.418 veces superior a la del promedio de los demás pacientes pediátricos.

Un caso digno de estudio que sorprendió a los médicos. Hasta que se decidieron a secuenciar el genoma del virus del bebé en un intento de buscar una explicación al misterio. Y la encontraron en parte. El patógeno se correspondía con una variante nunca vista bautizada como N679S, que poco después se descubrió que también circulaba en la región del Medio Atlántico de Estados Unidos, aunque hasta el momento no se ha observado que presente un mayor riesgo en lo que se refiere a una mayor capacidad de transmisión.

Por ahora nadie sabe si lo ocurrido al bebé se trata de un hecho excepcional o si será un indicativo de algo más. «Podría ser una completa coincidencia», explicó en un primer momento la jefa de Enfermedades Infecciosas del Hospital Nacional de Niños, Roberta DeBiasi. Pero no acaba de creer en las casualidades. «La asociación -dijo- es bastante fuerte. Si ves a un paciente que tiene exponencialmente más virus y es una variante completamente diferente probablemente esté relacionado».

Jeremy Luban, virólogo de la Escuela de Medicina de Massachussetts, subrayó que la carga viral en la nariz del bebé «es de por sí un dato alarmante y digno de atención», aunque eludió hacer especulaciones, ya que también indicó que podía deberse a que el sistema inmunológico del bebé todavía no estaba lo suficientemente desarrollado, «lo que permitió la replicación descontrolada del virus». La cepa detectada en el recién nacido, que fue tratado en septiembre aunque su caso no fue desvelado hasta ahora en un artículo científico, presenta una modificación en la proteína S del virus, la que permite acceder a las células.