El hospital de Lugo realiza test del coronavirus a pacientes sin que se bajen del coche

María Guntín
María Guntín LUGO / LA VOZ

SOCIEDAD

CEDIDA

La medida fue implementada ayer y contribuye a no saturar la atención domiciliaria

20 mar 2020 . Actualizado a las 13:11 h.

Los últimos datos oficiales y actualizados este viernes indican que son 46 los casos de coronavirus en la provincia de Lugo. En Galicia, el número de infectados asciende a 567, según la Consellería de Sanidade. El domingo eran nueve los casos registrados en la provincia y, este martes, se situaba en los 26. Desde la Xunta recuerdan que es indispensable seguir las recomendaciones decretadas por las autoridades sanitarias y permanecer en casa.

El Hospital Universitario Lucus Augusti también se prepara para un probable aumento de ingresos de pacientes con COVID-19. Por ello, ayer por la tarde se puso en marcha un dispositivo de recogida de muestras para pacientes jóvenes y sanos a los que el Servicio de Medicina Preventiva activa la sospecha de coronavirus. Los pacientes acuden a una zona del hospital habilitada en su propio coche, y allí, enfermeras y enfermeros les recogen la muestra y, posteriormente, les comunican el resultado telefónicamente. Este nuevo método ayuda a que esté menos saturado el servicio domiciliario y a que también se utilicen menos medios, explica el doctor Rafa Monte, director del área asistencial de la provincia y portavoz de la comisión del HULA que trata el tema del coronavirus.

Un ala del hospital, aislada

En estos momentos, el ala de una planta del hospital está destinada a los pacientes con coronavirus. En total son aproximadamente 32 las camas disponibles en esta zona, que ya está vacía. «Aquí solo se atenderá a pacientes con COVID-19 y, si este ala se llena, se vaciará la de al lado, por lo que serán más de 60 las camas disponibles», explica Monte.

Ante esta crisis sanitaria, el HULA tendría la capacidad si llega a ser necesario para acoger entre 200 y 300 ingresos. Asimismo, sería posible habilitar plantas cerradas del hospital. «Hay dos UCIS ahora mismo, pero se podrían trasladar enfermos a reanimación y, de ser necesario, a despertar», explica Monte.

Ahora, los profesionales sanitarios están analizando minuto a minuto los avances del coronavirus «doce horas, parecen doce meses», comentan. Además, se está reubicando al personal y adaptándolo a las necesidades que surgen con el paso de los días.

Desde el hospital piden a la gente que mantenga la calma y que se instale la serenidad para sobrellevar esta situación de la mejor manera posible y así, facilitar el trabajo de los profesionales sanitarios.

En el HULA se han suspendido las cirugías y solo se realizarán aquellas que sean urgentes o que estén relacionadas con oncología.

«El número de pacientes en la provincia no es muy elevado, pero habrá que esperar»

Rafael Monte también explica que las últimas cifras indican que el número de pacientes en la provincia no es exagerado, pero que hay personas ingresadas con COVID-19. «Es como si viéramos los casos con varios días de retraso porque ahora mismo estamos tratando a pacientes que llegaron de zonas de riesgo o que venían de Madrid. Es decir, en la mayor parte de los casos hay un componente epidemiológico vinculado con los viajes. Pero la semana que viene llegarán las personas que se han contagiado de los pacientes que tratamos ahora mismo», añade el doctor Monte.

La necesidad de la cuarentena

Monte también explica que si la gente se queda en casa «en dos o tres semanas debería de bajar el número de casos. Pero si no se hace caso y aumentan los contagios, entonces el problema será serio». De momento, no hay transmisión comunitaria y los médicos saben dónde se contagió el paciente.

Todos los servicios del hospital tienen un plan de contingencia específico para impedir el riesgo de contagio

En el HULA, todos los servicios tienen un plan de contingencia específico para reducir el riesgo de contagio. Los pacientes de oncología están aislados en el interior del hospital y, además, en este servicio hay un protocolo específico. Por ello se han restringido las visitas al máximo. «En condiciones normales no debe entrar ni una persona con gripe, por lo que es importante que no entren acompañantes que puedan tener algún problema respiratorio», explica el doctor Monte.

Medidas de protección

Monte explica que en el hospital lucense se están llevando a cabo medidas de protección extremas para los sanitarios que están en contacto con pacientes confirmados o sobre los que recae una alta sospecha. El suministro de mascarillas y elementos de protección está garantizado, explica el director del área lucense, que también cuenta que el personal sanitario trata de clarificar cuándo deben usar los elementos de protección y cuándo no son necesarios. «A veces se utiliza en situaciones en las que no hacen falta y eso sí podría comprometer el suministro. Lo que está claro es que en los puntos calientes con pacientes con COVID-19, el abastecimiento está garantizado. Incluso si el aluvión de pacientes llega a ocupar gran parte del hospital, esperamos tener suministro igual», explica Monte. Por ello y más en estos momentos de crisis sanitaria, en el hospital están centrados en utilizar «las mascarillas correctas y en los sitios correctos» porque, por ejemplo, no tiene sentido que las lleven puestas profesionales en el interior del centro sanitario.

El personal recibe formación para afrontar la crisis

Los sanitarios del HULA reciben cada día información de infecciosas y del Servicio de Medicina Preventiva. «Todos los días explicamos cómo usar las mascarillas, por ejemplo, porque está claro que los recursos son limitados», explica el doctor Monte. Además, desde el hospital están en contacto constante con la Consellería y con el Ministerio de Sanidad.