-También está pendiente la regulación de estas técnicas. ¿La ciencia vuelve a correr más rápido que la ley?
-La regulación siempre va detrás de la ciencia, pero precisamente por eso somos unos cuantos aquí en Europa los que hemos lanzado una iniciativa que lo que pretende es promover la discusión y el uso responsable de las técnicas de edición. ¿Qué quiere decir el uso responsable? Que no todas las cosas que podemos hacer las debemos hacer.
-Como mejorar la especie, por ejemplo, para ser más altos, más guapos o más listos?
-No, no, utilizar la edición genética para mejorar la especie es algo que está fuera de toda discusión. Todo lo que estamos discutiendo en este momento tiene que ver con aplicaciones de salud. Todo lo que sea utilizar esta tecnología para el mejoramiento o embellecimiento humano no entra. Hay un acuerdo unánime para no hacerlo.