El Compos basará su defensa en una mayor posesión que el rival

Ignacio Javier Calvo Ríos
NASO CALVO SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

XOAN A. SOLER

Rodri Veiga destaca que el Arenteiro mantiene un bloque sólido y compacto

10 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El Compostela medirá sus fuerzas esta tarde (17.00 horas) ante el Arenteiro en O Espiñedo, un escenario muy complicado y en el que los de Rodri Veiga deberán vaciarse para recuperar parte del botín perdido en los duelos más recientes frente al Leganés B y el Bergantiños. La misión de los blanquiazules es convertir los dos últimos empates anteriores en tres puntos.

Para este nuevo derbi, el entrenador de la escuadra compostelana cuenta con casi todos sus efectivos. Los hermanos Seoane, habitualmente titulares en los dos laterales de la defensa, ya llevan una semana y media y dos trabajando a tope. Jimmy y Saro pelearán por un puesto en el once inicial ante el Arenteiro. Rafa Mella, que tuvo algunas molestias musculares, que le obligaron a pedir el cambio la semana pasada frente al Bergantiños en San Lázaro, también viajará a Carballiño. Descansó el lunes, pero ya entrenó con normalidad el resto de la semana.

Enfrente estará el Arenteiro, un adversario «muy sólido, un bloque muy compacto que nunca le pierde la cara al partido», explica Rodri Veiga en vísperas del derbi. En O Espiñedo, lleva una racha como local al alcance de muy pocos. Es un equipo que compite muy bien, reconoce el entrenador compostelanista, independientemente de las circunstancias que se encuentre en el camino o de lo que le proponga el rival. El Arenteiro, reitera Rodri Veiga, «compite los noventa y tantos minutos» de cada partido. Además, cuenta con un factor a favor muy relevante, pues tiene una afición que empuja mucho.

Dos empates

Ante el Leganés B y el Bergantiños, el Compos dejó escapar una victoria que tuvo en la palma de la mano. En el feudo madrileño incluso llegó a jugar con superioridad numérica, pero al filial alcanzó las tablas con uno menos sobre el terreno de juego en la recta final del choque. Contra el once de Carballo, el Compos pudo sentenciar en la primera parte, Perdonó y luego lo pagó con la pérdida de dos puntos. Dos empates que supieron a muy poco en el vestuario compostelanista. «De los dos me llevé un sabor agridulce», subraya el técnico.

Por eso, Rodri Veiga, que reconoce que el equipo trabaja muy bien las transiciones, siendo muy verticales, ahora tiene que «seguir trabajando en los momentos del juego, saber cuando hay que correr y cuando conviene más ponerle un poco de pausa a los partidos, para hacer venir al rival y volver a hacerles daño, o simplemente solo porque nos venga bien descansar con el balón en determinados momentos. Hay que insistir un poco en eso, incidir en el juego de posición».

Trabajar con humildad y con las mismas ganas que hasta ahora son dos argumentos a los que apela el entrenador blanquiazul para el derbi de esta tarde y para todos y cada uno de los encuentros de liga.

Posesión

Sobre el derbi de hoy, el técnico del Compos asume que está entrenando a un equipo que intentar siempre defender con balón, porque es el ADN de sus futbolistas. Si no tienen el esférico sufren, les cuesta un poco más. El colectivo trabaja para encontrarse más cómodo cuando el cuero esté en poder del adversario.