Pequeñas y puntuales colas en las cajas de algunos establecimientos
08 ene 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Ya son pocos los que se lanzan como posesos a los establecimientos comerciales para adquirir productos necesarios o no por el simple hecho de ser el primer día de rebajas. De hecho, en la jornada de ayer, por la mañana, no se vieron ni aglomeraciones en las puertas de acceso a los centros comerciales ni largas colas en los probadores y cajas de los comercios de las cadenas del textil. Por la tarde hubo, en momentos puntuales, pequeñas concentraciones de compradores que portaban en sus manos entre una y tres piezas de ropa. Algo muy distinto a las largas colas hechas por acompañantes resignados, que antaño guardaban el turno mientras el resto se afanaban por buscar cualquier trapito que llevarse a casa.
La afluencia, en cualquier caso, fue algo mayor a los centros comerciales que al Ensanche, casco histórico o Área Central en la jornada de mañana y, por la tarde, la diferencia era más amplia. En esta circunstancia fue determinante el mal tiempo y la lluvia constante, que ha marcado el ritmo de ventas incluso durante toda la campaña navideña. Al ambiente más tranquilo y sosegado de las compras pudo contribuir también el hecho de que muchos establecimientos decidieron adelantar los descuentos al 2 de enero; e, incluso en algunos casos, al 26 de diciembre. Seguramente, la posibilidad de escalonar las compras evitó que ayer los comercios de ropa juvenil se vieran abarrotados.
En cualquier caso, los que se adentraron en el ejercicio de buscar gangas en las estanterías de los establecimientos compostelanos lo tuvieron más bien difícil. En los comercios que comenzaron ayer las rebajas se colgaron en sus escaparates grandes carteles, que anunciaban descuentos del 50 %, aunque los productos que tenían esta reducción de precio no eran precisamente la mayoría y solo servían como reclamo.
Los compradores consultados se quejaban de que los artículos con descuentos del 50 % en un centro comercial eran solo los más caros, que incluso con descuentos están al alcance de pocos bolsillos. Los productos más baratos que estaban disponibles ayer en las tiendas volvieron a ser las camisetas o zapatos tipo bailarina, mientras que los abrigos o trajes de una cadena textil tenían rebajas pequeñas o de estas prendas se ofertaban pocas tallas. Las quejas se dirigieron hacia la presencia en algunas tiendas de ropa juvenil de años anteriores. Otra queja vuelve a ser la confusión generada por la mezcla de productos rebajados con otros de la nueva temporada que, sin embargo, están perfectamente rotulados.
El 20 % y 30 % de rebaja son las principales opciones para la inmensa mayoría de los artículos de ropa y calzado. Así pues, todavía habrá que esperar a las segundas o terceras rebajas para conseguir descuentos más suculentos. En algunos de los establecimientos que iniciaron sus gangas hace cinco días, los rebajas alcanzan hasta el 70 %. Eso sí, en un puñado de artículos que se utilizan como reclamo para que los clientes entren y comprueben que los descuentos generalizados son menores.
Otros productos
Si bien el sector que más demanda acapara en las rebajas de invierno es el del textil y calzado, otros gremios también han colgado el cartel de descuentos aunque sin despertar el mismo interés por parte de los compradores. En los centros comerciales, las secciones de electrónica consiguieron atraer a un importante número de clientes interesados en las ofertas del primer día de rebajas y otros aprovechando los descuentos para adquirir artículos que ya había sido vistos en las jornadas anteriores. En esta sección, el interés se centró especialmente en televisores, ordenadores portátiles y diversos accesorios para teléfonos móviles, iPad y tablets. En uno de los centros comerciales de la ciudad, el Plan Renove para los televisores atrajo ya a compradores en la campaña de Navidad y ayer siguió despertando el interés por parte de quienes se acercaron hasta los establecimientos.