En manos de profesionales

Joaquín Dosil PROFESOR DE PSICOLOGÍA EN LA UNIVERSIDAD DE VIGO

OPINIÓN

MICHAEL REYNOLDS | Efe

08 ago 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

En los últimos meses dos casos de presión psicológica han alertado al mundo del deporte. Si primero fue la tenista Naomi Osaka en Roland Garros, recientemente la gimnasta Simon Biles en los Juegos de Tokio ha puesto de relieve públicamente la relevancia de la salud mental en los deportistas de máximo nivel mundial. En ambos casos la presión psicológica parece ser el fondo de sus abandonos o de la disminución de su rendimiento. Una presión que se gesta poco a poco, producto de los entornos del deportista y de las estrategias personales que han ido forjando a lo largo de su carrera deportiva para saber lidiar ante este tipo de situaciones. Lo que han dejado claro, tanto en un caso como en el otro, es que los deportistas de élite, antes que deportistas son personas. Son personas con sus miedos, sus inquietudes, sus expectativas, sus problemas, su forma de percibir la realidad que les ha tocado vivir.

La cantidad de información que llega al deportista hoy en día es ingente. Desde las personas que le rodean, pasando por las redes sociales y los medios de comunicación convencionales. Una información que hay que saber interpretar y digerir. De no ser así es fácil sentir la presión psicológica, tanto la impuesta por la sociedad como la impuesta por el propio deportista.

Diferentes trabajos científicos revelan que entre el 40-50 % de los deportistas sienten presión psicológica (agravada con la pandemia). Sea como sea, cuando un deportista siente esa presión psicológica tiene que tener muy claro que hay profesionales preparados para ayudarle: los psicólogos del deporte. El profesional de la psicología del deporte está capacitado para trabajar en la prevención de la presión que conlleva su actividad y, lo más importante, en gestionar esa presión cuando surge. Es por ello que en estos momentos en los que se habla de salud mental se debe entender que no es un tema menor, un aspecto que se solventa con lecturas de autoayuda, vídeos de Internet o con la buena fe de los entrenadores, padres o consejeros. Parece que todo el mundo cree saber y puede opinar de psicología.

La psicología del deporte es una ciencia, los psicólogos del deporte son los profesionales encargados de velar por la salud mental de los deportistas.