¿Podrían ser 50.000 muertos?

Jorge Mira Pérez
Jorge Mira MIRADA EN LA CIENCIA

OPINIÓN

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23 jul 2020 . Actualizado a las 19:31 h.

La celebración del homenaje de estado a las víctimas del coronavirus nos recuerda la necesidad de detallar el impacto global de la mayor crisis sociosanitaria en ochenta años. Por un lado, sabemos la cifra de muertos de las personas confirmadas como enfermas por coronavirus: son unos 28.000. Por otro, el INE ha acometido con urgencia el contaje de los certificados de defunción habidos en España durante el año 2020. Es un trabajo que debemos agradecer y que normalmente requiere un año.

El 3 de junio el INE indicó que hay un exceso de 44.000 defunciones desde principios de año hasta el 24 de mayo en comparación con las habidas en el año 2019. El 1 de julio el INE publicó datos semanales de mortalidad en los últimos veinte años. Con ellos un investigador de la Universidad de Sevilla ha determinado que desde el 2 de marzo al 24 de mayo, añadidas a las 90.000 personas que mueren habitualmente hay un exceso de 50.000 más: es el uno por mil de la población. El cambio de 44.000 a 50.000 (con los mismos datos), se debe a una diferencia técnica en la manera de hacer la cuenta: medir el exceso para todo lo que llevamos de 2020 frente a medirlo solo en los 3 meses de crisis.

Entre finales de marzo y principios de abril, mueren 1.100 personas al día. Este año hay un terrible exceso de otras 1.600 personas al día. Si se hace un cómputo global por cada 100 fallecidos confirmados de covid-19, hay un exceso adicional de 81 fallecidos sin causa conocida aún. Es un trabajo para el futuro analizar su causa.