Retorno parcial
Pero, ¿cuán realista es un escenario de regreso de la industria? Los últimos movimientos en factorías de automóviles o los cierres de las empresas del aluminio no invitan al optimismo. Sin embargo, los expertos creen que la vuelta es posible, más si se tiene en cuenta que los costes en el país asiático se han disparado. No ocurrirá hoy, ni mañana. Es una inversión a largo plazo: «No será necesariamente una vuelta a casa, pero puede ocurrir», sostiene el economista Emilio Ontiveros. En su opinión, «muchas empresas se están dando cuenta de que las cadenas de valor internacionales, de producción transfronteriza, no pueden depender excesivamente de China. Puede haber una reconsideración de las localizaciones. Quizá su protagonismo sea menor». Hay medios, conocimiento y capital humano. Faltan las inversiones. Ahora que por fin la Comisión Europea está dispuesta a endeudarse por primera vez en su historia para sufragar el relanzamiento de las economías, se abre una ventana de oportunidad.
Gigantes industriales
Las multinacionales todavía tienen alternativas en otros países asiáticos como Vietnam o Indonesia. Así que muchas no volverán. Pero el futuro se juega en otro terreno: crear gigantes europeos, con la digitalización y la economía verde por bandera. Por eso se están revisando de urgencia las normas antimonopolio. Sin «supercampeones » no se podrá competir. El escenario que le espera a España, a pesar de los cierres recientes, no es tan pesimista. ¿Qué pasará con el sector del automóvil,? «España es importante en el ensamblaje de componentes. Tenemos empresas eficientes y con capacidad de supervivencia. Tendrán que reinventarse», asegura Ontiveros. Aunque muchas de las empresas tienen la matriz en otros países europeos, las sinergias podrían revitalizar la industria española.