Y no es el único aparato de entretenimiento que se cuela entre los favoritos: le acompaña, en quinto lugar, la Xbox One X, la tercera interacción de la Xbox One tras el lanzamiento de la S, un potentísimo cacharro revisado, destinado a ofrecer resoluciones 4K nativas. Y vaya si lo hace. La calidad de las imágenes de sus títulos es impresionante.
Hay más: una rareza a caballo entre el terminal telefónico y el videojuego. Se trata del Razer Phone, presentado a principios de noviembre y enfocado a ofrecer gaming de calidad en móviles. El dispositivo, que ronda los 750 euros, es todo lo que un gamer puede pedir: es potente y cuenta con una batería que dura y dura -y que se recarga muy velozmente- y con unos altavoces capaces de alcanzar altísimos decibelios sin distorsionar ni un poco el sonido. Ocupa el séptimo lugar de nuestras preferencias y alcanzó altos picos de búsqueda, especialmente, la semana de su lanzamiento: la primera del penúltimo mes del año.