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La pesca reprocha al Gobierno que no frene la «sangría de desguaces»

salvador serantes VIVEIRO / LA VOZ

SOMOS MAR

PEPA LOSADA

El sector advierte en Expomar Burela que peligra la flota, no los recursos

16 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Armadores y cofradías reunidas en Burela con motivo de la feria Expomar transmiten un «malestar profundo y general» con la Secretaría de Pesca por su «evidente desafección con el sector, pues cada vez existe más distancia entre sus necesidades y las respuestas de la Administración». Entre otros ejemplos, mencionan la «sangría de desguaces», que quieren frenar porque España «ya se excedió en los sacrificios» y, sobre todo, porque ven en peligro a la flota y, en consecuencia, a empresas, empleos y riqueza que genera.

Anteayer, también en Expomar, el secretario general de Pesca apeló al sector, pidiendo su cooperación cuando «todos estamos haciendo las cosas medianamente bien». Ayer, dirigentes de 15 organizaciones de armadores y cofradías lo censuraron por «desconocer nuestra realidad y el esfuerzo hecho» para reducir flota, «a pesar de la mejora evidente de los recursos». Claman contra la «sangría de desguaces» porque, tras «contribuir a superar la mala situación de los stocks, regulaciones elaboradas desde despachos lejanos a puertos y barcos no permiten garantizar la sostenibilidad económica y social de las empresas».

Armadores y cofradías calculan que la flota pesquera española se ha reducido a la mitad en algunos segmentos. Cada barco desguazado significa perder empleos directos e inducidos, por lo cual juzgan «necesaria una apuesta política contundente para defender al sector como actividad económica estratégica».

«Queremos seguir pescando sin necesidad de ayudas», proclaman. Brindan cooperación «clara, transparente y activa» a la Administración. No para que «esté más preocupada en recaudar» ni tampoco para que su política «pivote únicamente sobre la inspección y el control, olvidando lo fundamental, la gestión de los recursos». En su opinión, se «hace de espaldas» a ellos, en una «inadmisible desconexión entre IEO, sector y Administración que supone que no se trasladen datos que hemos proporcionado para defender mejor los intereses españoles» en la UE.

Los dirigentes reunidos ayer en Burela recalcan que la pesca «es la única actividad en la que parece que hay una presunción de culpabilidad», pese a que ellos dicen compartir los objetivos de una «actividad sostenible ambientalmente a largo plazo, gestionada de forma coherente para generar beneficios económicos, sociales y de empleo, y para contribuir a la disponibilidad de productos alimenticios».

Discrepan de que el «problema esté en la comercialización; es más una cuestión de gestión inadecuada, de espaldas a los actores, o incluso de falta de ella». Tienden la mano a la Administración para «mejorar la gestión» y corregir cuestiones como algo que les parece «inasumible, que se esté negociando una cuestión tan esencial como la obligación de desembarques sin habernos consultado». También protestan porque «llevamos años esperando por la creación del registro de posibilidades de pesca, fundamental para garantizar la seguridad jurídica» de la flota.

Los riesgos potenciales que trae el fin de los descartes

En su vigésimo segunda edición, el Encontro Empresarial de Organizacións Pesqueiras Expomar incidió en el mensaje que anteayer lanzó en Burela la pesca cuando calificó las normas la UE como «letales» para la flota gallega y española. En la segunda y última de las Xornadas Técnicas Expomar, Luis Francisco Marín, gerente de la Organización de Productores Pesqueros de Ondárroa, denunció «la falta de sensibilidad y contradicciones en instancias de la UE».

Desde el País Vasco, cuya flota pesquera «languidece», Luis Francisco Marín aplaude lo que pudo constatar estos días en Expomar Burela: que el sector «está por la labor de seguir peleando y resistir», para mantenerse como fuente de empleo y riqueza.

«Amenazas» con los descartes

El debate de ayer por la tarde en Burela giró alrededor de la seguridad y protección de los trabajadores del mar. En pleno debate sobre la aplicación de la norma que prohíbe los descartes y prevé eliminarlos por completo en el 2019, Luis Francisco Marín desveló que un comité comunitario, donde están representados armadores y sindicatos, envió un informe a la UE denunciando que la obligación de desembarcar todo lo que se capture puede suponer «serias amenazas» para la seguridad de los barcos y de las tripulaciones. Un riesgo potencial «que no ha sido evaluado» y que, en opinión de empresarios y sindicalistas, puede «afectar en determinados momentos a la estabilidad de los buques y a las horarios de trabajo de los marineros».

Hoy, cónclave de cofradías

La feria náutico-pesquera Expomar continúa hasta mañana en Burela. Aparte de las innovaciones que presentan parte de los más de cien expositores que concurren este año, este mediodía hay otro cónclave, el de la Federación de Confrarías de Pescadores de Galicia.