Los feligreses del cura denunciado por abusos en Sarria le trasladan su apoyo en una carta

André Siso Zapata
André S. Zapata LUGO / LA VOZ

SARRIA

El párroco (derecha), salió en libertad del juzgado de Sarria, acompañado por sus representantes legales
El párroco (derecha), salió en libertad del juzgado de Sarria, acompañado por sus representantes legales LAURA LEIRAS

Los fieles le transmiten a su párroco su «cariño» en estos «momentos difíciles por los que estamos pasando todos, en especial tú y tus padres». Sigue apartado del sacerdocio a pesar de haber quedado en libertad

26 jun 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

«Estamos contigo, D. Carlos». Así arranca el comunicado publicado estos días por los feligreses de la comunidad parroquial de Rosario, en Sarria, como muestra de apoyo al cura denunciado y detenido por unos presuntos abusos sexuales hacia una menor. De esta manera, los fieles le transmiten a su párroco su «cariño y apoyo» en estos «momentos difíciles por los que estamos pasando todos, en especial tú y tus padres». La comunidad continúa el comunicado transmitiéndole su total «apoyo y agradecimiento por lo mucho que llevas realizando desde que estás entre nosotros» y sobre todo «la labor que estás haciendo promoviendo con los jóvenes, organizando el Camino [...] todo ello para ayudarles a dar sentido a sus vidas, para que las vivan desde la Fe y con valores».

Mencionan también su dedicación con los niños y adolescentes que se preparan para recibir los sacramentos, la acogida a las personas que se acercan a la parroquia y a los peregrinos y a los enfermos». Por todo esto, dicen, «te apoyamos y confiamos en ti». Los feligreses rematan diciendo que «por todo queremos expresarte nuestro máximo apoyo y decirte que te necesitamos y esperamos que vuelvas pronto entre nosotros. Firmado, «tus feligreses de todas las edades y de las varias parroquias».

El sacerdote, de 42 años, fue detenido el pasado jueves como presunto autor de un delito de agresión sexual a menor. Una joven de 17 años lo había denunciado por unos supuestos tocamientos meses antes. Finalmente, tras declarar en el juzgado, el cura quedó en libertad bajo una orden de alejamiento y con condición de investigado. Por el momento, la Diócesis de Lugo lo mantiene apartado de sus funciones.