El Camino se vuelve a llenar de peregrinos: «É o mellor momento de toda a pandemia»

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Ocho amigos de Málaga llegan peregrinando a Portomarín
Ocho amigos de Málaga llegan peregrinando a Portomarín Carlos Castro

Los albergueros apenas tienen sitios libres y los hosteleros no descansan. Portomarín recupera su vida, aunque está «saturado»

01 ago 2021 . Actualizado a las 10:39 h.

El Camino de Santiago se presenta este año como una forma de turismo idónea para la situación sanitaria actual. La naturaleza y la cercanía, además de su tradición, están multiplicando el número de personas que peregrinan este año hasta la Praza do Obradoiro. Esto se hace notar en Portomarín, que incluso durante los meses más laxos de pandemia parecía un pueblo fantasma, y ahora recuperó su bullicio diario con peregrinos ocupando todas sus calles.

Para los albergueros son buenas noticias, ya que «hai máis xente que o ano pasado», cuando después de la primera ola del coronavirus habían dado un respiro a las restricciones, e incluso afirman que está siendo «o mellor momento de toda a pandemia», como cuenta Pedro Rodríguez, del Mesón Rodríguez, ubicado en la calle principal del pueblo. Los días previos a la festividad del 25 de julio, Portomarín, uno de los sitios más deseados para dormir del Camino Francés, no dio abasto con todos los caminantes. «Dende ese día a afluencia de peregrinos mantense», explica Rodríguez. Es por eso que auguran que el mes de agosto volverá a ser bueno si las restricciones no son más severas.

A diferencia de un año normal, y más un Xacobeo, el 80 % de los peregrinos son españoles y un 20 % extranjeros. Las exigencias para viajar entre países recorta las posibilidades de los caminantes de fuera de España, algo que lamentan los gerentes de los hospedajes. «A xente quere durmir barato, trae pouco diñeiro», cuenta Rodríguez.

Saturación

Para los hosteleros el cartel de completo también es el día a día, incluso afirman que el pueblo está «saturado». «Es raro el día que alguien no duerme en la calle», relatan. El aforo obligatorio del 30 % en los albergues repercute en los locales de hostelería, entre los que se observan constantemente terrazas llenas con un gran ambiente. «Terían que vir máis repartidos, non todos de golpe», proponen.

Entre los miles de peregrinos que pasaron esta semana por Portomarín se encontraba un grupo de ocho amigos de Málaga que peregrina desde Ponferrada haciéndose ver con una gran bandera verde y blanca de Andalucía. Para dejar aún más huella no solo en el propio trayecto, se hicieron una cuenta de Instagram llamada «chaminantes2021» en la que suben contenido a diario relatando sus vivencias. La pandemia no ha influido para nada en sus risas ni en su experiencia: «Está siendo la mejor de nuestras vidas, lo estamos pasando en grande».