
Los edificios de la Fundación Amancio Ortega requieren unas dimensiones mínimas
30 sep 2020 . Actualizado a las 11:13 h.La nueva residencia de la tercera edad que se construirá en el solar del viejo hospital ampliará su tamaño sobre el terreno y dejará sin el espacio previsto a la futura comisaría, que se pretendía que compartiese parcela. La Consellería de Servicios Sociales explicó ayer que la nueva residencia que construirá y pagará íntegramente la Fundación Amancio Ortega tendrá que amoldarse a los estándares de calidad de la fundación. Y uno de ellos es que las residencias que construyen no pueden tener más de dos plantas de altura, por considerar que los edificios de muchos pisos no son los apropiados para personas de la tercera edad. Al construir solo dos plantas, el edificio necesitaba tener mucha más extensión, y por ello la Fundación le planteó a la Consellería de Servicios Sociales que necesitaba muchos más metros, o en caso contrario no participaría en el proyecto. La Consellería, propietaria de toda la parcela, tomó la decisión de cederla completa para construir la residencia, dado que alternativa sería buscar otra parcela fuera de la ciudad o renunciar a la colaboración de la Fundación Amancio Ortega. Dado que para la futura comisaría nunca se llegó a barajar todavía un anteproyecto ni una consignación presupuestaria concreta del estado, la consellería entendió que no sería lógico renunciar a la residencia por un proyecto que puede tardar aún algunos años.
Desde Servicios Sociales explicaron ayer que las residencias que paga la Fundación Amancio Ortega tienen un modelo determinado: pocas alturas, máximas calidades en la construcción para buscar la comodidad de los residentes. Por tanto, en el caso de la de Lugo, no se trata de una decisión particular aplicada a Lugo sino de aplicar los estándares habituales de la Fundación para sus residencias.
La de Lugo tendrá 126 plazas, tal como estaba previsto, pero solo en dos plantas, y ocupará toda la parcela actual, de siete mil metros cuadrados, dejando zonas verdes y espacios de paseo y aparcamiento alrededor.

Si algún día se hace un nuevo edificio para la Policía habrá que buscarle otra ubicación
La falta de espacio en la actual comisaría de Policía de la calle Chantada fue motivo de larga reivindicación hasta que desde el gobierno central en al época de Rajoy se dijo que no habría una ampliación sino una nueva comisaría porque la actual se quedaba pequeña para la ciudad. La confirmación de esa idea se produjo cuando Feijoo anunció al ministro de Interior de Rajoy, Juan Ignacio Zoico, en febrero de 2017 la posibilidad de construir la nueva comisaría de Lugo en el solar que dejaría libre la residencia. La decisión se afianzó y cuando la Xunta presentó el proyecto de todo el complejo, se reservó espacio para la comisaría. Sin embargo, casi cuatro años después, el proyecto de la comisaría nunca ha tenido consignación presupuestaria alguna, ni siquiera para redactar un anteproyecto. Por ello la Xunta ha tomado la decisión de ceder todo el espacio a la residencia de la tercera edad que demandó la Fundación Amancio Ortega. Y en el futuro, si existe decisión en firme de construir una nueva comisaría, habrá que buscarle ubicación.