Termina el invierno récord en Lugo

Suso Varela Pérez
suso varela LUGO / LA VOZ

LUGO

Cerezos japoneses en la Ronda do Carme
Cerezos japoneses en la Ronda do Carme OSCAR CELA

Desde 1951 no se habían registrado temperaturas medias tan altas en la provincia

24 mar 2020 . Actualizado a las 19:45 h.

Dejamos atrás un invierno singular e histórico por el coronavirus pero también porque hemos vivido los meses más calurosos de los últimos 70 años, desde que la Aemet tiene registros históricos. La anomalía de la temperatura media entre el 22 de diciembre y el 20 de marzo ha sido de dos grados en varios municipios de la montaña lucense (Pedrafita, Triacastela, O Courel) y de entre 1,5 y 2 grados en Lugo capital y los municipios del centro y sur de la provincia. Fueron las temperaturas tan altas de febrero y lo que llevamos de marzo las que han convertido esta estación en inusual.

Aemet destaca que este invierno fue el tercero más cálido desde 1971 (solo superado por 1989-1990 y 1997-1998), pero en el caso de la provincia de Lugo la media de 1,5 grados superior a la histórica gallega lo ha convertido en un hecho histórico. Hasta el punto, de que febrero casi alcanzó en algunos municipios lucenses los tres grados de media por encima de la serie desde 1951.

Que haya sido una estación calurosa no significa que fuese seca. Salvo, febrero, el balance hídrico en Lugo, según Aemet, es el normal, compensado con los días de diciembre que fueron muy lluviosos, así como algunos de marzo.

Pero para comprender la dimensión del invierno de récord hay datos de Meteogalicia muy explícitos. En febrero, la temperatura media de Lugo capital fue de 9,8 grados. En este siglo, el anterior febrero más cálido había sido en el 2008, con 8,5 grados. La media de febrero en Lugo en el siglo XXI antes del 2020 era de 6,4 grados, con lo que este año se registró una temperatura de 3,4 grados por encima de la serie histórica. El 23 de febrero se alcanzaron los 24,1 grados en Lugo o los 24,6 en Monforte, un registro propio de primavera y verano. Este marzo ya se han registrado los 22,6 grados de máxima. En febrero, Aemet registró en Lugo capital la mínima más alta desde que tiene datos (1986), con 12,6 grados.

La mitad de horas de frío

Otro dato que muestra lo anómalo de este invierno se puede comprobar en las horas de sol y en las horas de frío que registró la estación meteorológica del Campus de Lugo. En febrero del 2019 hubo 355 horas de frío y en el 2018, 459 horas. En cambio, este año se computaron 178 horas, la mitad menos que en febrero del 2019.

Lo que llevamos de marzo cumple el mismo patrón: En el 2018 hubo 399 horas de frío, en el 2019 fueron 274 y este marzo solo 131. Curiosamente las horas de sol no aumentaron este invierno, y eso que este año fue bisiesto. La razón se debe a más horas de nieblas y días nubosos pero sin incidencias en las temperaturas y a que las jornadas de precipitaciones estuvieron dentro de lo normal.

Otro ejemplo de un invierno único se puede comprobar en las jornadas con heladas. En febrero hubo siete en Lugo, frente a las 12 del 2019 y en marzo no hubo ninguna noche helada, mientras que el pasado año fueron cinco.

La anomalía de la montaña

Donde más han notado el incremento de temperaturas medias este invierno han sido los vecinos de la montaña lucense. Apenas ha habido jornadas de nieve y siempre ha sido muy escasa (la última gran nevada fue en otoño, el 16 de noviembre), pero además aumentaron las horas de sol y se alcanzaron días de 18,1 grados en lugares como la estación meteorológica de Os Ancares, a 1.345 metros de altitud.

Las medias de este invierno superaron los dos grados de lo habitual en las estaciones de Pedrafita y Triacastela. Y es que apenas se registraron noches de heladas.