Estabilizado el incendio en Ribas de Sil, el mayor del año y que ya ha arrasado 1.500 hectáreas

Francisco Albo / Luis Díaz MONFORTE / LA VOZ

RIBAS DE SIL

A primera hora de la tarde se ha desactivado el nivel 2 de alerta, puesto en marcha por la cercanía de las llamas a núcleos de población. Feijoo da por hecha la intencionalidad: «Hubo un foco que posteriormente se amplió con dos focos más. Y eso suele ser la pauta habitual de los incendiarios»

07 sep 2021 . Actualizado a las 19:16 h.

El incendio forestal que se declaró a última hora del domingo en el municipio lucense de Ribas de Sil está estabilizado, según acaba de anunciar, a primera hora de la tarde, el 085. Ha arrasado una superficie de casi 1.500 hectáreas, según el último balance de la Consellería do Medio Rural. Se trata del mayor incendio del año registrado en Galicia. La propia Consellería subió al nivel 2 la emergencia provocada por el este fuego intencionado, que ya ha saltado a varios municipios limítrofes, ese nivel quedó anulado también a primera hora de la tarde.

La proximidad de las llamas a núcleos de población como Rairos hizo que la consellería pidiese de forma preventiva la intervención especializada del Ejército, la UME, que ha desplegado 63 militares y 26 medios de extinción.

Debido a la cercanía del fuego —que se extendió al vecino municipio de Quiroga—, durante la jornada del lunes fue necesario cortar temporalmente la circulación en las carreteras LU-P-5301, N-120 y LU-P-933. Según indicaron desde la Guardia Civil de Tráfico, en las dos primeras se restableció el tráfico poco después, mientras que la tercera continúa cortada por más tiempo. Asimismo, según precisó el ADIF hacia las siete de la tarde, el fuego también obligó a cortar el tráfico entre San Clodio —capital de Ribas de Sil— y Freixeiro —en el municipio de Quiroga— en la línea ferroviaria de Monforte a Ponferrada y León.

Este martes, durante una visita a un centro escolar, el presidente de la Xunta, ha desvelado que en la noche del lunes recibió una llamada del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, a quien agradeció «la coordinación» de los medios de extinción con la Unidad Militar de Emergencias (UME) desplegada en la zona.

El presidente de la Xunta también ha recalcado la intencionalidad de este gran incendio: «Todo acredita que la pasada noche del domingo, una vez que los medios ya no pueden volar, hubo un foco que posteriormente se amplió con dos focos más. Y eso suele ser la pauta habitual de los incendiarios».

De hecho, Feijóo ha vuelto a pedir «colaboración ciudadana para detectar cualquier conducta sospechosa» y «ponerla en conocimiento de las fuerzas y cuerpos de seguridad». Y ha avanzado que octubre puede ser un mes complicado por los incendios. 

El conselleiro de Medio Rural, José González, que se desplazó el lunes a Ribas de Sil, ya había afirmado que el origen del incendio es «claramente intencionado» y que esta circunstancia ha sido acreditada por investigadores de su departamento. González señaló que la Xunta hará lo posible por poner a los responsables del siniestro «a disposición da Xustiza» y apuntó que la lucha contra el fuego se vio muy dificultada por las condiciones atmosféricas de la zona, donde ayer se registraban altas temperaturas y fuertes vientos. El conselleiro añadió que «o que fixo este desaguisado onte [por el domingo] sabía perfectamente o que estaba facendo».

El fuego, que comenzó el domingo por la noche en Ribas de Sil, se originó en dos puntos diferentes. Según indicaron desde el gobierno local, uno de los frentes atravesó la carretera provincial LU-P-5302 —que une la capital del municipio con el alto de A Moa—, mientras que el otro cruzó una carretera local que enlaza la provincial con la localidad de Vilariño.

Esta localidad y la de As Fontes son en las que estuvo más cerca el fuego durante las primeras horas del incendio. Si bien el fuego no llegó a amenazar las construcciones de estas localidades, desde el Ayuntamiento señalan que en determinados momentos se valoró la posibilidad de evacuar a los vecinos de Vilariño para prevenir posibles daños causados por la humareda del incendio. Finalmente, sin embargo, esta medida no se consideró necesaria. El hecho de que el incendio empezase a última hora del domingo impidió que en las primeras horas se utilizasen medios aéreos.

Despliegue militar para proteger las aldeas amenazadas

El fuego estuvo al pie de las casas en lugares como Carballo do Lor
El fuego estuvo al pie de las casas en lugares como Carballo do Lor

La UME estableció el puesto de mando avanzado en la localidad de Margaride, en Quiroga, una de las que se vieron amenazadas por el fuego. La base logística está situada en el pabellón polideportivo del municipio de Quiroga. Un oficial de enlace trabaja en Santiago con los responsables del centro de coordinación central de la Xunta.

Durante la tarde del lunes, el incendio amenazó al pueblo de Rairos, situado al pie de la N-120, que tuvo que ser cortada al igual que la vía del tren en la línea ferroviaria Monforte-Ponferrada. En las últimas horas, otros frentes se cercaron a las aldeas de Carballo de Lor, Margaride, Vilar y Xestoso. Los vecinos de Carballo de Lor tuvieron que ser trasladados cautelarmente a un hostal cercano. «Houbo perigo para as casas nalgún momento, peor non para as persoas», declaró el conselleiro de Medio Rural, José González Vázquez, que se desplazó a la zona para seguir el operativo. «O que fixo isto sabía perfectamente que podía provocar moito dano», afirmó el representante de la Xunta en referencia a la intencionalidad del fuego. La unidad de investigación pudo comprobar que en el origen de este incendio hubo varios focos simultáneos separados por centenares de metros.

Las elevadas temperaturas diurnas y nocturnas de las dos últimas jornadas, en las que por momentos se registraron fuertes vientos del sur, complicaron las labores de extinción del fuego. En la madrugada del lunes al martes el fuego también se aproximó peligrosamente a la aldea de Salcedo, en A Pobra de Brollón. El ocupante de la única casa habitada en As Laceiras, en la ribera del río Lor, tuvo que ser desalojado por la Guardia Civil ante la cercanía de las llamas. El terreno quedó arrasado en sus proximidades, pero milagrosamente el fuego no alcanzó esta construcción. El alcalde de A Pobra, José Luis Maceda, siguió el operativo en la zona de Beirán desde las cinco de la madrugada. La UME tuvo que montar tendidos de mangueras de más de un kilómetro de largo en una zona de fuertes desniveles para contener el fuego. «O vento era impresionante e cando caía unha muxica no chan prendía lume ao momento», señala Maceda. Aunque algún foco próximo se reavivó a primera hora de la mañana, el fuego parecía haberse estabilizado este mediodía en ese frente. Alrededor del mediodía, la lluvia hizo acto de presencia y contribuyó a ralentizar el avance del incendio en los puntos en los que seguía sin ser atajado.

Poco después de las once de la mañana, el director xeral de Defensa do Monte, Manuel Rodríguez, valoró en la zona de Carballo do Lor la situación del incendio, al que se refirió como «o máis complexo que tivemos nos últimos anos». Según indicó, en estos momentos no hay riesgo para ningún núcleo de población en los tres municipios afectados. Por su parte, la subdelegada del Gobierno en Lugo, Isabel Rodríguez, se desplazó esta mañana a la zona para supervisar el dispositivo y entrevistarse con los mandos del batallón de intervención de emergencias. Rodríguez avanzó que la UME incorporará más medios humanos y materiales a las labores de extinción. El operativo se reforzará, según avanzó, con medios terrestres y aéreos del Ejército.