Chirac llama a los franceses a no provocar una «avería» en la UE

La Voz E. S. CORRESPONSAL | PARÍS

INTERNACIONAL

Instó a no confundir la Constitución europea con un rechazo al Gobierno» Guerra abierta en el partido del Gobierno ante el «día después» del reférendum

26 may 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

Jacques Chirac se dirigió anoche a los votantes -y especialmente a los de izquierdas- diciéndoles que tienen en sus manos «una parte del destino de Francia», en un último intento de reconducir el referéndum sobre la Constitución europea del domingo, que según los últimos sondeos ganaría el no por un 55% de votos. En un solemne y dramatizado mensaje institucional articulado en torno a preguntas y respuestas, el presidente de la República pintó a los franceses un panorama sombrío en caso de que el país se descuelgue del proceso de construcción europea: Si Francia dice no se abriría un período de «división, dudas e incertidumbre» y provocaría la «avería» de Europa. «Téneis una responsabilidad ante la historia como patria de los derechos humanos», dijo desde su estrado, con las banderas europea y francesa al fondo. «Los ultraliberales tomarán el mando y nos llevarán a una Europa sin ambiciones políticas que quedará reducida a una zona de libre cambio» y en ese caso «son los más vulnerables los que más sufrirán», añadió. Cambios en su política Chirac comenzó pidiendo a los votantes que «no se equivoquen de pregunta» porque «no es una elección de derechas o de izquierdas» ni tampoco «un sí o un no al Gobierno». Pero ha recibido el mensaje. Y ayer se comprometió públicamente a sacar conclusiones y a dar «un nuevo impulso» a su política interna en aras de más «solidaridad» y «dinamismo», en los dos años que le quedan de mandato. Descartó que, en caso de rechazo, Europa se pondría en marcha de nuevo con «otro proyecto». «No hay otro proyecto», sentenció. Europa estaría «averiada, en busca de un consenso imposible», mientras que el mundo seguiría avanzando de forma «acelerada». A tres días del referéndum, son ya 10 los puntos de ventaja que lleva el no en la intención de voto, según las encuestas publicadas por los diarios Le Figaro y Le Parisien . Realizadas el martes y el miércoles, son las últimas antes de la cita con las urnas y revelan que el rechazo se impone entre los votantes socialistas, después incluso de la intervención televisada del carismático ex primer ministro Lionel Jospin. Según otra encuesta realizada por Sofres-Unilog, el rechazo a la Constitución se quedaría en el 54% . Pero lo peor lo presagia el grado de decisión del voto: un 89% de los encuestados dicen tenerlo absolutamente claro. Luchas internas Si se cumplen los pronósticos, el terremoto político pondrá contra las cuerdas al presidente Chirac. Los «tenores», como aquí se llama a los notables del partido, han empezado a tomar posiciones. Especialmente el presidente de la Unión por un Movimiento Popular (UMP). Nicolás Sarkozy nunca ha ocultado sus ambiciones de llegar al Elíseo, pero se le ha cruzado en el camino su sucesor al frente del Ministerio de Interior. Dominique de Villepin cuenta con el apoyo del propio Chirac, por el que siempre ha demostrado una fidelidad inquebrantable. La tensión entre ambos se trasladó incluso a un mitin, en el que Sarkozy le reprochó el hecho de no haberse presentado nunca a unas elecciones. Villepin dijo no darse por aludido y recordó la «larga amistad que les une». Sutilmente quiso también refrescar la memoria de su compañero de partido: «Él sabe que le he echado una mano con frecuencia en la vida política». La cabeza de Raffarin la piden desde hace tiempo los franceses y ahora hasta el conservador Le Figaro le da por desahuciado. Ayer el progresista Liberation iba más allá al reclamar a Chirac incluso la convocatoria anticipada de elecciones. Los malos presagios de las encuestas no consiguen minar la moral del padre de la Carta Magna. Valery Giscard d'Estaing recurrió al fútbol para explicar lo que puede ocurrir el domingo: «Los sondeos dicen que va a ganar el Milan pero al final quien gana es el Liverpool».