El canterano habla por primera vez tras la polémica con Carlos Mouriño
07 sep 2021 . Actualizado a las 22:42 h.El jugador céltico Denis Suárez se pronunció por primera vez en una charla mantenida con Miguel Lago en su espacio de Twitch Hablando de cosas sobre el desencuentro con el Celta que hizo público Carlos Mouriño justo antes del inicio de liga. Con cautela, y sin querer entrar de lleno en la polémica, el salcedense desmintió dos tesis claves del presidente del club vigués: que el canterano se había posicionado en contra de la entidad y que la empresa que le representa comercia con niños.
Suárez indicó que le «extrañó» que Mouriño explicara lo que había ocurrido, aunque recalcó que dio su versión y que no ha trascendido lo que él le respondió en esa conversación que mantuvieron. «Tengo que acatarlo. Es el dueño del club y es el que manda. Yo soy un empleado y tengo que trabajar, entrenar y cambiar las cosas en el campo», indicó. Asegura que no le tiene que afectar sobre el terreno de juego y que, de hecho, no le afecta. También quiso darle normalidad a que pueda haber discrepancias entre jefes y empleados.
Fue rotundo al decir que «nunca» se ha puesto «en contra del club», como al negar que Intermedia Sport Player subaste a niños, palabras que utilizó textualmente el máximo accionista céltico. «La empresa no comercia con niños. Un niño de doce años se va porque los padres quieren que se vaya. Si el padre quiere que vaya al Real Madrid... No tengo más que decir al respecto», respondió en alusión al caso de Bryan Bugarín -el canterano que despuntó en La Liga Promises y cuyo fichaje por el club blanco desencadenó la tormenta- pero sin mención directa al pequeño. Incidió en que él no toma decisión alguna, «y menos en este caso concreto».
Denis reveló que tuvo tres opciones para salir del Celta este verano a raíz de que Mouriño le abriera la puerta, confirmando que una de ellas fue el Milan. Pero nunca se planteó salir. «Hablé mucho con el míster, me preguntó si me iba a ir y le di mi palabra de que no», detalló. Dicho eso, ya no hubo duda alguna. «Cuando doy mi palabra, voy a muerte. Le dije -a Eduardo Coudet- que estuviera tranquilo con todos los rumores y lo que saliera», añadió.
A la pregunta de si se ve un año en la grada -opción que planteó también Mouriño dada la situación entre las partes y que nunca negociarán una renovación con Intermedia-, señaló que no es algo en lo que piense ahora mismo porque «de aquí a final de temporada pueden pasar muchas cosas» y no se para a pensar en ello porque no es el momento. «Creo que sería desviarse del camino que me corresponde. Estoy centrado en hacer una temporada tan buena como el año pasado o mejor», manifestó. Para él, el objetivo sigue siendo Europa.
Además, aseguró que en ningún momento pensó que la afición del Celta le pudiera pitar en el primer partido de Liga. Considera que su compromiso con el club no puede estar en duda porque su implicación y dedicación con la entidad y con su gente son «máximas», dijo. Aunque le gustaría retirarse en Vigo, incidió en que no sabe qué ocurrirá y también dejó claro que en su día fue el club el que quiso venderle y que él, en ese momento, hubiera preferido jugar en Segunda con el primer equipo antes que cualquier otra opción.
Europa sigue siendo el objetivo
Denis Suárez mantiene que el objetivo del Celta debe ser Europa. Lo pensaba antes de comenzar la temporada y lo mantiene pese al mal inicio. «La ilusión no se puede perder por tres partidos», sostiene. Y lo argumenta en base a una serie de circunstancias que cree que explican lo sucedido: «Algunos iniciamos la pretemporada tarde. Fue mucha paliza física, pero hubo gente que llegó sin vacaciones, la plantilla no estaba cerrada y no es lo mismo con los rumores y demás», señaló a Miguel Lago. Además, a su juicio, el Celta se ha medido «a los tres equipos más físicos de la liga», con el añadido de que «Osasuna venía de haber jugado once partidos» por cinco de los celestes, contando el de la primera jornada de liga, analizó.
Para Denis, hay «muchos jugadores», incluido él, que necesitan «coger ritmo de partidos» y lo están haciendo. Él asume su responsabilidad en la meta colectiva que se sigue marcando. «Espero ser más determinante, más decisivo. Porque debo serlo, porque para eso vine y estoy convencido de que el equipo va a salir adelante», recalca. Para eso, para estar entre los seis primeros, continuó, tienen que compartir ese convencimiento «todos», entrenar cada día desde esa idea: «El camino es largo y se necesita de todos», recordó el jugador, decidido también a «apartar el ruido mediático».
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