Examen de confirmación

x.r.c. VIGO

GRADA DE RÍO

rc celta

El Celta, con la misma idea de juego y la probable novedad de Aidoo, debe ratificar en San Mamés su cambio de tendencia, en juego y en resultados

04 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Partido para la confirmación en San Mamés. El Celta necesita ratificar en uno de los feudos históricamente más difíciles para la entidad la mejoría del juego, su nueva apuesta táctica de la mano de Coudet y, sobre todo, los resultados. Casi medio año después, también en Euskadi, el conjunto vigués tiene la opción de encadenar dos victorias consecutivas. En aquella ocasión fue en Anoeta tras golear al Alavés y ahora es en la catedral bilbaína tras el solvente triunfo sobre el Granada. Pero los de Garitano también están en un momento de repunte con siete puntos de los últimos 12 y con Villalibre y Vencedor como las nuevas referencias de un equipo que necesita rejuvenecerse.

Athletic y Celta han tenido un inicio de liga lleno de dudas y agitado. En San Mamés, la cabeza de Gaizka Garitano estuvo a punto de ser cortada en más de una ocasión, pero el técnico de Derio aguantó porque fue capaz de cambiar el rumbo. Sentando a vacas sagradas como Raúl García y Dani García y dando la alternativa a jóvenes secundarios como Vencedor en la sala de máquinas o Villalibre en el frente de ataque. Asier une a la esencia del típico nueve vasco el moverse por todo el ataque. En el Celta la tormenta fue mayor, con cambio de entrenador incluido.

Pero los dos parecen vivir ahora un nuevo tiempo. En el caso de los vizcaínos, el empujón les ha dado para una cómoda posición intermedia, pero un pelín engañosa porque solo tiene tres puntos de margen con respecto al descenso, que precisamente marca el Celta, aunque con una marabunta de equipos de por medio.

A los vigueses el paso al frente solo les ha servido para abandonar la posición de colistas, pero también para cargarse de confianza y pensar que una vida tranquila es posible. Pero las buenas sensaciones de Sevilla y el triunfo ante el Granada necesitan de un nuevo respaldo para dar continuidad a la línea ascendente. Además, San Mamés parece un lugar ideal para el tercer examen al 4-1-3-2 que naufragó en el Pizjuán pero que recibió el respaldo unánime en la última cita de Balaídos. Está por ver cómo responde Tapia como pivote único ante Mikel Vesga, Unai Vencedor y la tropa de media puntas del equipo rojiblancos, alguno de ellos auténticas gacelas como Iñaki Williams.

En este escenario, la figura de Aidoo parece más necesaria que nunca y el ghanés podría ser la única novedad en la formación inicial, lo que significaría que Araujo o Murillo visitarían el banquillo. De hacerlo el cafetero, sería algo inédito porque ha sido un fijo para los dos entrenadores aunque no atraviesa su mejor momento. Tampoco el mexicano está a la altura esperada.

En cuanto al resto, todo indica que tendrá continuidad por cuarta jornada consecutiva con Iago Aspas como absoluta referencia. El de Moaña, que ejerce de termómetro del Celta, buscará prolongar a su partido colosal del pasado fin de semana. Si lo consigue, el Celta estará más cerca que nunca de acabar con la larga maldición del nuevo San Mamés.