Coudet era la tercera opción

La Voz VIGO

GRADA DE RÍO

EFE, REUTERS

Las exigencias de Marcelino y la imposibilidad de afrontar la cláusula de Berizzo abonaron el camino para que el Chacho pueda probar en Europa

10 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El Celta mantuvo la negociación abierta con Marcelino García Toral hasta el último momento, sondeó las posibilidades de recuperar a Eduardo Berizzo y entabló conversaciones con Eduardo Chacho Coudet. Finalmente, la tercera opción es la que está camino del banquillo celeste.

Marcelino, como en su día lo fue Óscar García, es una vieja aspiración de la dirección del Celta. En esta ocasión, los vigueses apostaron con decisión por hacerse con los servicios del asturiano, hasta el punto que el propio Carlos Mouriño tomó parte en la negociación directa. Con el extécnico del Valencia había un entente económico, pero la planificación deportiva fue el detonante de la negativa del entrenador que llevó a los ché al título de Copa del Rey. Marcelino quería un proyecto ganador y reclamaba fichajes y el Celta solo le garantizaba uno en el mercado invernal, un número insuficiente vistas las carencias del plantel.

De haber cristalizado, la opción de Marcelino García sería dar un cambio radical en la política de contratación de técnicos en el Celta, que nunca se ha caracterizado por apuestas de alto coste económico para el banquillo.

Con Eduardo Berizzo, actual seleccionador de Paraguay, también hubo contactos, pero además del compromiso del argentino con su selección, había otro escollo insalvable, los dos millones que tendría que abonar de cláusula liberatoria, lo que convertía en imposible el fichaje en estos tiempos de apreturas económicas. El Toto vive en Asunción, la capital de Paraguay, y está centrado en el clasificatorio sudamericano para el Mundial del año 2022. Bonano, Kisluk y Marcucci siguen a su lado mientras el profesor Pablo Fernández, el preparador físico, unió su camino al de Jorge Sampaoli.

Los contactos con Coudet tampoco son nuevos. La semana pasada trascendió que el argentino le había dado un no al Celta en la primera tentativa y, además, en Brasil apuntaban que seguiría al menos hasta final de Liga con el Internacional de Porto Alegre. De hecho, el domingo volvió a eludir hablar del Celta después del partido de su equipo.

Sin embargo, los vigueses volvieron tocar a su puerta y lograron convencerle en el día de ayer ofreciéndole un contrato de dos años en el fútbol español, una propuesta que terminó aceptando. Robert Moreno, Javi Calleja y Pacheta eran otros nombres que habían sonado.

El tope salarial

Con el despedido de Óscar García y el fichaje de Coudet, el Celta estrecha su margen de maniobra con el tope salarial de LaLiga, ya que debe indemnizar al técnico catalán y reflejar en cuenta el dinero que va a cobrar Eduardo Coudet, lo que en teoría merma la disponibilidad para fichar en el mercado de enero.