Imanol: «No es normal que el Celta solo lleve cinco goles a favor con semejante plantilla»

La Voz VIGO

GRADA DE RÍO

Javier Etxezarreta

El entrenador de la Real no se fía del equipo vigués y espera un partido difícil en Balaídos

25 oct 2019 . Actualizado a las 14:17 h.

El entrenador de la Real Sociedad, Imanol Alguacil, comentó en la previa de la visita de su equipo a Balaídos que «no es normal que el Celta solo lleve cinco goles a favor con semejante plantilla». Considera que su rival de este domingo tiene «una gran plantilla, con jugadores de mucha calidad» y que, además, «viendo los partidos, han hecho méritos para hacer más goles».

Alguacil ve al Celta como «un gran rival», igual que entiende que lo era el Betis, al que derrotaron en la jornada anterior. «Vamos a tener un partido difícil ante un gran equipo, con jugadores por momentos y por líneas mejores que nosotros. O somos conscientes de eso o vamos a sufrir», advirtió.

La explicación para que el Celta esté abajo con jugadores como Aspas, Denis, Rafinha o Mina está para el técnico de la Real en «la igualdad que existe». «Es difícil hacer partidos como los que hemos hecho frente a Alavés o Atlético, lo tomamos con normalidad y es increíble», razonó. Porque considera que «aquí todo Dios aprieta, hay mucho nivel, cada partido cuesta un mundo. Hay que trabajar mucho y a veces haciendo bien las cosas no da para sacar el partido», apuntó.

Preguntado por si el Celta es un equipo peligroso más allá de Aspas, añadió más nombres. «Los que hemos citado más Méndez, Hugo Mallo, Aidoo, que está a un grandísimo nivel. Son muchos, tienen una gran plantilla, creo que no hay que menospreciar a ningún equipo y menos con semejante nivel», expuso. Anticipó que irán a Balaídos «a por ellos, a intentar ganar y sabiendo que va a ser complicado».

Para el técnico no hay ningún estímulo clasificatorio y «menos en esta jornada». «No sé si voy a llegar a diciembre, no lo sé, es lo que siento. La silla se mueve rápido y me preocupa el día a día». A su juicio es «de locos» que ya vayan varios entrenadores destituidos en Primera y otros estén «en la cuerda floja». «Es una suerte estar aquí sentado porque en tres semanas esto cambia radicalmente y la cola que hay para entrenar a un equipo como la Real, o también como el Celta, es larga y buena, seguramente».