La costumbre más necesaria

La Voz VIGO

GRADA DE RÍO

Óscar Vázquez

El Barça no ganó en sus tres últimas visitas ligueras al Celta en Balaídos

30 abr 2019 . Actualizado a las 20:48 h.

El ciclo triunfal del Barça ha encontrado en el Celta una especie de criptonita. Los culés no han ganado en sus últimas tres visitas a Balaídos, con dos triunfos y un empate para el cuadro vigués, que el sábado necesita que se repita un resultado positivo en su lucha por la permanencia. De hecho, desde el regreso a Primera, de seis visitas culés a Balaídos el equipo catalán ganó dos, con dos empates y otros tantos triunfos locales.

El Celta comenzó a tomarle la medida al Barcelona en Balaídos en septiembre de 2015, cuando un recién retornado Iago Aspas anotó por partida doble iniciando su particular afición a marcarle goles a Ter Stegen. Nolito y Guidetti saliendo desde el banquillo redondearon un triunfo que se edificó en el primer tiempo con un 2-0 al descanso. El Barça había llegado a Vigo con su espectacular tridente del momento (Neymar, Messi y Luis Suárez) pero solo el brasileño pudo batir a Sergio Álvarez. Los célticos bajo la batuta del Toto Berizzo presionaron a su rival muy arriba y se aprovecharon de los robos para superar al equipo entonces entrenado por Luis Enrique.

La historia se repitió un año después, aunque con un punto más de emoción. El Celta ganó 4-3 en un duelo en donde Aspas y Pione Sisto, además de un gol en propia meta de Mathieu, pusieron el marcador 3-0 pero Piqué se encargó de amenazar el triunfo con dos goles. En medio, un tanto del Tucu Hernández para el recuerdo al rechazar con su cabeza un saque de portería de Ter Stegen. Neymar cerró con el 4-3 definitivo.

La pasada campaña tampoco ganó el Barcelona en Balaídos. Los dos encuentros de la era Unzué ante el equipo catalán finalizaron con empate a dos goles. El de Vigo, ya en la recta final del campeonato, fue una sucesión de golpes. Los azulgrana se adelantaron por dos veces en el marcador con tantos de Dembélé y Alcácer y otras tantas empató el Celta con dianas de Jonny y Iago Aspas. El de Moaña le ha marcado a los catalanes en sus tres últimas visitas a Balaídos.

Al margen de estos tres partidos hay un cuarto en donde también el Celta fue capaz de sumar ante el coloso culé. En una situación todavía más dramática que la actual, en el año del retorno a Primera División cuando los celestes buscaban puntos para salir de la zona de descenso. En aquel partido disputado en la Semana Santa del año 2013 y con Abel Resino en el banquillo celeste un gol con la cabeza de Oubiña en el último instante permitió salvar un punto que terminó por convertirse en decisivo. Antes había marcado Natxo Insa el 1-0 y el Barça le había dado la vuelta con tantos de Tello y Messi.

Entre este partido y la racha hoy vigente, que comenzó en el 2015, también median dos encuentros con victorias culés en Balaídos. La primera en la 13/14 por un incontestable 0-3 (Cesc, Alexis y Yoel en propia meta marcaron los goles) y un año después un tanto de Mathieu en estrategia resolvió el duelo (0-1). Fue la misma temporada en la que el Celta había asaltado el Camp Nou en la primera vuelta.

En total, de 18 puntos que ha disputado el Barcelona en Balaídos solo ha pudo sumar ocho, lo que convierte al escenario vigués en uno de los menos proclives para el campeón conjuntamente con Anoeta, en donde han sufrido en los últimos años.

El secreto para esta buena racha del Celta ante el Barça puede encontrarse en la similitud de apuesta futbolística y a que al equipo de Valverde no le gusta demasiado que le puedan discutir el balón. Además, en todos estos partidos el cuadro vigués tuvo el acierto necesario ante un rival de semejante entidad.

Ahora, a la estadística se añade un dato que debe ser determinante: el Barca no se jugará nada el sábado mientras al Celta le va la vida en ello, de ahí que mantener la tradición de restarle puntos a los culés se haga más importante que nunca.