Hay muchos espacios gastronómicos que se definen como bistrós, pero pocos responden al concepto más auténtico: un local de carta corta y fresquísima. Sí lo hace Greca
22 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Hay muchos espacios gastronómicos que se definen como bistrós, pero pocos responden al concepto más auténtico: un local de carta corta y fresquísima, porque cambia todos los días al ritmo de lo que mande en los mercados locales. Este es el caso de Greca, novedad en A Coruña (conserva el nombre, pero reabrió hace siete meses totalmente reformado) y que cumple todos los mandamientos de un bistró verdadero: cocina de temporada a buen precio y recetas casi tradicionales aderezadas por dos manos inquietas: Alma García y Víctor Rulo.
Ella conoce bien las reglas que hacen fiel a la clientela; creció en una de las tabernas clásicas de la ciudad, el Odilo de la calle de la Torre, que cerró casi por sorpresa cuando el edificio fue declarado una ruina. «Con mi padre aprendí mucho y por azar allí conocí a profesores de hostelería que hicieron que dejase mi carrera para entrar en su escuela», explica Alma, que ha heredado sabiduría y proveedores de grandes casas del barrio de Monte Alto. Los productos del mar llegan del mismo pescadero que surte al restaurante O Bebedeiro; las verduras de un puesto cercano y cada día visitan las plazas de Lugo o San Agustín. Algo que explica que al menos tres de las propuestas de la carta muden a diario.
El alma de bistró se demuestra en los arroces de temporada: ya hay uno (el negro) que es un clásico, a pesar de la corta trayectoria del restaurante. Es una ración tan generosa que la casa la recomienda para dos personas y acierta. Como también en el sabor de un plato que deja degustar calamar de la ría y pulpo con un arroz en su punto.
Las croquetas de boletus son otro regalo de sabor en las que se aprecia que hay oficio ante los fogones. Llegan bien presentadas y sin ornamentos superfluos, siguiendo la estética de un local que luce un reguero de arte. Lo concibió el escultor coruñés Benito Freire (suyo es también el diseño de un paragüero con vida verde que da la bienvenida) y cuenta con obras de Gosia Trebac, Edu Albo, Victoriano Fernández y Dorda. La vajilla y el servicio persiguen un único propósito: la sencillez acogedora. De hecho, uno de los fuertes del local es que puede ser un refugio perfecto para grupos grandes, ya que las mesas se disponen para cada ocasión e incluso -como el día de la visita de La Voz- comer en una mesa pequeña en compañía de dos grandes pandillas era agradable, porque en el local funciona bien la gestión de los ruidos.
Carta muy breve, aunque con sustancia, porque ofrece caza en la más ligera de sus versiones como un carpacho de reno; un solomillo de jabalí con puré de castaña y setas o una ensalada de perdiz escabechada y foie.
Siempre hay pescado del día en una fritura mixta con una harina de arroz, que se acompaña de un alioli de ajo negro, el más suave de su especie. Y en el Facebook se pueden consultar las propuestas inspiradas en la reina de la lonja cada jornada: el viernes, por ejemplo, era la lubina salvaje con espinacas y piñones. En temporada de alcachofas el repertorio gastronómico rinde homenaje a los propietarios anteriores de este local, antiguos cocineros de la marisquería El Rápido.
El momento dulce llega con tres bocados caseros: una milhojas -receta secreta de la casa- con crema de vainilla al burbon, que es un bocado fino para golosos exigentes; un chocolatísimo brownie con crema de cacao y Nutella para todos los públicos y la opción para los que buscan terminar con piruetas: un cremoso de queso con fresa y frutos rojos y bizcocho de piñones con manzana salteada, polvo de jengibre y helado de vainilla. Todos nacen en una cocina sin prisas. La bodega, en construcción, llega a bastantes denominaciones y a moscateles de Navarra. Promete crecer apostando por proyectos familiares, con alma, como la casa Amador García de La Rioja. El café de pota -al estilo tradicional y de una selección especial- no es el final. Hay posibilidad de primera copa especiada.
Restaurante Greca
La casa recomienda. Croquetas de jamón; una de las carnes gallegas de la carta del día preparadas a baja temperatura (en la foto) o el arroz de temporada y la milhojas artesana.
De 14 a 50 ?
A CORUÑA. Historiador Vedía, 34
981 262 176 / info@grecabar.com
Cierra domingos noche y lunes