La autora de «Los Cinco» no abandona la infancia

FUGAS

MARCOS MÍGUEZ

Enid Blyton ha cumplido 120 años envuelta en una polémica rentable. Sus «Famous Five» viven su nueva edad de oro con aventuras inéditas para primeros lectores

04 ago 2017 . Actualizado a las 05:30 h.

La aventura continúa, pero de forma más light, más polite, digamos que de manera afín a unos tiempos en que una mancha en la ficción puede desatar una tormenta muy real. Al hablar del fenómeno editorial que sigue siendo Enid Blyton (Londres, 1897- 1968) a sus 120 años, la infancia se abre, como se abre la caja de Pandora. Elegida la autora más querida por los británicos, a Enid Blyton la tachan con razón de clasista, sexista y racista, llegaron a vetarla durante décadas en la BBC y en las escuelas, pero el corazón lector tiene sus reglas, propias, volubles, auténticas. Los detractores de la reina de la literatura infantil advierten además de una supuesta afinidad a Hitler y de su personalidad al borde del trastorno, que interpretó Helena Bonham Carter en Enid, biopic que revela los dramas de esta serial writer precoz que tecleaba con la máquina de escribir en las rodillas en su jardín de Green Hedges a un ritmo de ¡10.000 palabras al día! «Lo que Enid hizo como escritora fue brillante, pero lo que hizo como madre dista de ser brillante. Enid Blyton era arrogante, insegura, pretenciosa, emocionalmente inmadura, hábil para sacar de su mente cosas desagradables y sin rastro de instinto maternal», escribió su hija Imogen en el libro A childhood at Green Hedges. Bien, sí, claro, la realidad es otra historia.

¿Cuántos aprendimos a leer (sin parar) con Enid Blyton? Con linterna, jengibre e incluso entre mademoiselles que no sabíamos pronunciar. El autor Antonio Orejudo descubre su apego a la autora en Los Cinco y yo, un guiño a la generación del 68 y a los niños que crecieron en Kirrin y hoy tienen más de 40.

Tras décadas dormidos, Julián, Dick, Ana, Jorgina y Tim han despertado para darle un buen bocado a las ventas. «Funciona muy bien la nueva colección de Los Cinco en Juventud para pequeños, las ilustraciones y el diseño son muy chulos. Son libros que a los padres les gusta comprar a sus hijos porque a ellos les apasionaban de niños», apuntan Nieves Santos y Tamara Yuste, de la Librería Santos Ochoa, que reunió para Fugas en su tienda de A Coruña a lectores de Los Cinco de varias generaciones. Dolores, Manuel, Celia, Lucas, Tomás, Iago y Álex dan la cara por los Famous de Enid en nuestra portada.

A sus 75 años, que cumplirán en septiembre, Los Cinco siguen teniendo su fama. Y eso que «el tirón de Torres de Malory (RBA) entre niñas de 10 o 12 años es todavía mayor, compite con El diario de Nikki», afirman las libreras.

Los Cinco es hoy un destino lector atractivo para la infancia, pero la aventura se inició años atrás. En 1942 se publicó el primer título de la serie, Los Cinco y el tesoro de la isla. La apuesta por la estrella de los libros de Blyton en el mercado español lleva a los 60 (y al reading boom de los 70, en los que pillar libro era un subidón). «Apostar por la serie de Blyton fue mérito de la editora de Juventud en aquella época, Conchita Zendrera, una mujer con mucha visión que, además de por Los Cinco, apostó por otras series también de éxito, como la de Tintín», cuenta Luis Zendrera, director gerente del sello que introdujo a Los Cinco en España. «Es cierto que, aunque de niños no reparábamos en eso, releyendo los primeros libros ahora -admite-, se ven temas graves. Sexismo, racismo. Hace unos cinco años revisamos esos textos, decidimos cambiarlos un poco, manteniendo la esencia de Enid Blyton, y hubo mucha polémica al respecto», comparte Zendrera.

¿Resta el cribado moral valor literario a la obra de Blyton? «Nosotros hemos intentado cambiar lo mínimo. Y el cambio ha tenido cosas positivas: las aventuras de Los Cinco empezaron a ser de nuevo lectura escolar», señala, cuando llevaban años proscritos.

Países como Francia han hecho dos versiones de los primeros Cinco, apuntan desde Juventud, una de ellas completamente nueva «donde los protagonistas tienen hasta móviles». Pero quizá el gran encanto de este club está en la ausencia de distracciones y facilidades tecnológicas, ¿no?, en la falta de atajos de teclado para acercarse al cerro del contrabandista o a ese castillo en ruinas que conquistó a los fans (¿Corfe Castle?). Los Cinco se montaban su aventura sin más recursos que ellos mismos. Como alternativa, «hay que fomentar hoy ese tipo de lectura, esos juegos sin pantallas», apuntan desde el sello Juventud, que ha dado a Los Cinco nuevas caras y ofrece una colección de títulos inéditos en español de Blyton para primeros lectores.

Los actuales Cinco, como les vemos hoy en librerías (conviviendo con otros ilustrados por Enrique Ventura), deben su aspecto a Marina Vidal. ¿No les parecen mejores las ilustraciones originales de Los Cinco, las de José Correas? Quizá no. Serán cosas de la edad... «En el 80 Juventud vendía al año millones de ejemplares de los 21 títulos de la colección», indica Zendrera. ¿Cuánto venden Los Cinco hoy? «Medio millón anual de ejemplares», calcula. Los Cinco resisten (la competencia es muy fuerte) y viven «una segunda juventud» a sus 75 años. La aventura de leer pinta futuro. Nos vemos en Kirrin.