Turismo de catedrales

FIRMAS

XOÁN A. SOLER

La basílica compostelana es el punto más visitado de la comunidad, seguido por la playa de As Catedrais, las islas Cíes, el monte de Santa Tegra y la torre de Hércules

29 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El turismo que viene a Galicia acude atraído, sobre todo, por las catedrales: la de Santiago y la playa de Ribadeo. A estos dos lugares de máxima atracción los siguen en el ránking las islas Cíes, el monte de Santa Tegra, en A Guarda, y la torre de Hércules, símbolo de A Coruña.

La muralla de Lugo; el castro de Baroña, en Porto do Son; las playas de O Grove; las ciudades monumentales de Tui, Viveiro, Cambados y Pontevedra o las playeras de Sanxenxo y Baiona también destacan entre los destinos turísticos, pero las cifras de visitantes son más difíciles de cuantificar.

La catedral de Santiago recibió el último año santo, el 2010, una cifra récord de visitantes estimada en los 3,7 millones de personas. Este año, aunque no es jacobeo, la afluencia es tan grande que las autoridades turísticas esperan que roce los 3,5 millones. Solo por la puerta de Platerías están pasando a diario unas 3.000 personas; se estima en cerca de 7.000 al día el número de los visitantes de este centro espiritual y cumbre de la arquitectura barroca, por lo que al cabo del mes habrán entrado en ella unas 200.000 personas.

La otra catedral, construida por la erosión marina, que es la playa más famosa de A Mariña, alcanza cifras insospechadas de visitas: el máximo histórico de 14.000 personas en un día se logró el pasado día 13. Para el cierre del mes, el Concello de Ribadeo calcula que hayan pisado el arenal más de 250.000 personas. Si no fuera por la estacionalidad, la catedral natural le ganaría el primer puesto a la catedral de los maestros canteiros. Tanto éxito ya empieza a crear preocupación. A los monumentos naturales les pasa como a los experimentos de física de partículas: el ojo del observador altera el entorno. Miles de pares de ojos, y de pies, y de manos cada día deterioran la playa; el Concello de Ribadeo ha pedido a la Xunta que se controle el acceso para evitar esa erosión humana.

Aforo limitado

Donde ya se aplica una limitación de aforo es en las islas Cíes, que de no ser por ello podrían ser el primer atractivo turístico de Galicia. Solo entran 1.800 personas al día más 200 en grupos organizados y otras tantas por los fondeos privados; en total, 2.200. En lo que va de agosto ese cupo se cubrió prácticamente todos los días, y se calcula que a final de mes las habrán visitado unas 65.000 personas, cifra muy similar a la del año pasado. Después de que The Guardian considerase la playa de Rodas como la mejor del mundo, el pequeño archipiélago forma parte de numerosos paquetes turísticos gallegos y también es el complemento favorito de la mejor oferta hotelera del sur de Galicia.

El monte de Santa Tegra es uno de esos emblemas turísticos de Galicia que combinan dos de los mayores valores de la comunidad autónoma: un paisaje espectacular hermanado con una antiquísima y monumental ocupación humana. Aquel entorno y aquel poblado de cuento de hadas fueron objeto de 3.500 recorridos guiados en julio pasado, y recibieron un total de 43.000 visitas. En el Museo de A Guarda calculan que la afluencia cuando concluya este mes de agosto habrá sido muy similar a la del anterior.

La disputada quinta plaza en la lista se le puede adjudicar a la torre de Hércules, símbolo de A Coruña y de la permanencia en el tiempo de la obra de los romanos. En estos meses de verano, cada día suben los 234 escalones del faro unas 700 personas. Pero esta pequeña hazaña solo la acomete el segmento más atlético del total de visitantes, que, según los responsables del punto de información del monumento, son, como mínimo, otros tantos como los que suben, lo que hace un total de unas 1.400 personas al día, o sea, unas 42.000 al mes.