Fragatas en la nube

José Picado DE GUARISNAIS

FERROL

24 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Menudo revuelo (con perdón) se armó con esto de hacer fragatas en la nube. Fragatas virtuales que navegan en la red de redes, buques que no se tocan, ni se arman, ni se aprovisionan, ni se gobiernan, pero en los que se hace todo eso y más. Fragatas en las que trabajarán unos cuantos técnicos de Siemens, en colaboración con los ingenieros de Navantia y la Armada, naturalmente.

El asunto, ustedes ya estarán al tanto, es que la empresa Siemens Digital Industries Software fue elegida por Navantia para diseñar el gemelo digital de las fragatas F-110. Este sería el primer gran proyecto. Además, acompañará a los astilleros en su transformación digital, algo necesario en los tiempos que corren pero que, dicho sea de paso, ya forma parte de su día a día. En pocos lugares como en el astillero ferrolano se puede rastrear la evolución de todas las revoluciones industriales que en el mundo han sido, y también lo será la 4.0 y la revolución digital. El presidente de esta división de Siemens, Pascual Dedios-Pleite, hizo los honores de la presentación de semejante contrato en la sala de prensa (también en la virtual) de su compañía, delante de un retrato de su fundador Werner von Siemens y una frase lapidaria: «No podemos predecir el futuro pero sí inventarlo». Y se vino arriba, a las nubes o a los cielos, uno ya no sabe.

El señor Dedios-Pleite, en su comunicado, anunció que para hacer como dios manda todas estas tareas se crearía una oficina con un nombre de lo más rimbombante, el CESENA, Centro de Excelencia del Sector Naval, que tendría su sede en las oficinas regionales de Galicia, en el San Lázaro compostelano. ¡Qué tremendo patinazo el del señor Dedios-Pleite y su acompañante el señor Donato Martínez, a la sazón director de Tecnología y Transformación Digital de Navantia! ¡Diseñar fragatas, aunque sean digitales y naveguen por las nubes, en Compostela! El anuncio-misil cogió con el pie cambiado a todo quisque, incluido el alcalde compostelano José Bugallo que en esos días mantenía un rifirrafe con su colega de Vigo Abel Caballero acerca de si lo más importante era contar peregrinos o bombillas. Ferrol, ciudad departamental, ciudad naval, capital de la provincia marítima y cuna de las fragatas, no consintió y no consentirá jamás perder el control del diseño de esta clase de buque escolta, en el que ha conseguido la excelencia a nivel mundial. Aquí se construyeron fragatas de todo tipo desde La Galga dieciochesca hasta la F-105 Cristobal Colón. Se construirán las de la serie F-110, tanto las reales como las virtuales. Y también las F-120 que ya empieza a presentar la Armada. A esto, señores de Siemens y de la futura oficina CESENA, sí se le llama inventar el futuro.