Navantia recupera el sector «off-shore»

Beatriz García Couce
beatriz couce FERROL / LA VOZ

FERROL

<span lang= es-es >La «Farwah», la última plataforma</span>. Fue fabricada en Fene, la de mayor capacidad de almacenamiento de crudo salida de sus gradas y abandonó la ría en el 2003.
La «Farwah», la última plataforma. Fue fabricada en Fene, la de mayor capacidad de almacenamiento de crudo salida de sus gradas y abandonó la ría en el 2003. xabier novo< / span>

Después de diez años fuera de este mercado, ha presentado ya ofertas de plataformas

19 jun 2014 . Actualizado a las 12:59 h.

«Estamos dispuestos y además preparados para recuperar un mercado que ya fue nuestro, el off-shore. No hay nada de este sector que sea un secreto para Navantia». Así se pronunció ayer Abel Méndez, responsable comercial off-shore en la compañía pública, en el marco de una conferencia pronunciada en una jornada sobre eólica marina celebrada en el campus de Ferrol. Tan dispuesta está Navantia que ya ha presentado una oferta para construir una plataforma FPSO -unidad de almacenamiento y tratamiento de crudo- para Brasil, y ya ha acudido a ferias sectoriales con los productos que durante décadas construyó en sus instalaciones y que, subraya, continúan operativos en distintos países. Consuma la recuperación de una línea de negocio que posicionó a la antigua Astano en los primeros puestos de este sector a nivel mundial y que abandonó hace diez años.

Al igual que para el segmento de la eólica marina, los astilleros de Fene y Puerto Real (Cádiz) son los llamados a realizar los encargos que pudiesen producirse. Actualmente, el mercado está copado por las factorías asiáticas, pero Navantia sostiene que están teniendo problemas para entregar las plataformas en el tiempo requerido. Además, apunta al mercado africano -Angola, Nigeria y Gabón son algunos de los países con expectativas de contratación- y también al norte de Europa como los países en los que podría lograr encargos.

Abel Méndez sostiene que además de contar con instalaciones, personal cualificado y experiencia, los astilleros de Fene y Puerto Real apenas requerirían de inversiones para retomar la actividad en el off-shore, ya que pese a la caída en la ocupación, no han estado parados. Además, afirma que si antes no se apostó por este mercado fue por las limitaciones a la construcción civil que pesan sobre la compañía, y que finalizan en diciembre de este año. Afirmó también que el flotel de Pemez y la transformación del buque de Tapias son obras de este sector ya en marcha.