Crónica | Historia de una estafa El fiscal solicita más de cinco años de prisión para un joven al que se le imputa suplantar a otro y cargarle todos sus gastos
22 jun 2004 . Actualizado a las 07:00 h.?arco Antonio R. G., de 27 años, se sentó ayer en el banquillo del Juzgado de lo Penal para respoder de una cadena de delitos de estafa que le imputa el fiscal y por los que le pide más de cinco años de cárcel. Pero ¿Fue un hecho real como sostiene la acusación o una confabulación con intervención de la policía como dice la defensa? La apoderada del Banco Pastor cree que no. Ella fue quien descubrió la supuesta impostura de este muchacho cuando observó algo raro en sus movimientos bancarios. Según el fiscal, el 29 de abril de 1999 se presentó en la oficina principal del Pastor como Federico Carlos López Velo, un joven militar que reside en Cádiz y al que todo esto le ha creado bastantes problemas. Porque no se sabe cómo Marco Antonio se hizo pasar por él, siempre según la acusación, utilizó tarjetas a su nombre, firmó también con su identificación y asimismo usó un DNI con las señas suyas. La apoderada explicó al tribunal que por medio de averiguaciones dio con la casa donde vivía el sospechoso, en la calle Coruña. La casera le indicó que «andaba con varios carnés de identidad». También le localizó en el céber donde trabajaba entonces (1999). Meses después nuestro hombre hizo lo mismo en El Corte Inglés, y en el BBVA de Xuvia. Le cargó a Federico más de 6.000 euros. La caligrafa Vercher González dijo al tribunal que la letra de las firmas de los recibos bancarios es la de Marco Antonio. Federico, que viajó desde Cádiz para asistir al juicio como testigo, explicó su calvario hasta que se aclaró todo, al menos ante los bancos. Los policías que le investigaron confirmaron sus conclusiones. El acusado sostiene que es un montaje y pide que lo absuelvan. La jueza tiene la palabra.