Audi Q4 e-tron: cómodo, silencioso y con espacio

Por Javier Armesto

MOTOR ON

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Sin alcanzar los 4,60 metros de largo, el Audi Q4 e-tron ofrece una gran habitabilidad para los pasajeros y espacio suficiente para el equipaje familiar. Este SUV eléctrico destaca por su finura de marcha.

14 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El Q4 e-tron está a medio camino entre el Audi Q3 y el Q5 y se basa en la misma plataforma MEB que el Skoda Enyaq y el Volkswagen ID.4. Es un coche con un diseño rotundo, con la gran parrilla típica de la marca de los cuatro aros que en este caso está totalmente cerrada, al ser eléctrico y no necesitar la entrada de aire para refrigerar el motor. Los nervios que acentúan la parte superior de los pasos de rueda, las barras en el techo y los pilotos traseros unidos por una tira led, además del logotipo e-tron en grandes letras en el faldón inferior, le dan personalidad y empaque.

El interior destaca por el salpicadero asimétrico típico de los últimos Audi, con la pantalla multifunción de 12,3 pulgadas enrasada en él y orientada hacia el conductor. El volante hexagonal permite ver perfectamente el cuadro de instrumentos digital y los mandos que integra pueden funcionar como botones normales o como superficies táctiles. La consola central flotante alberga el selector de marcha y un botón de start/stop que solo es necesario pulsar cuando apagamos el motor, ya que para encenderlo basta con pisar el pedal del freno. Nuestra unidad de prueba montaba asientos delanteros deportivos, que ofrecen mucha amplitud y una gran sujeción lateral tanto en la banqueta (extensible) como en el respaldo.

Los pasajeros disfrutan de mucha altura hasta el techo y los de atrás pueden ir cómodos porque el espacio para las piernas es enorme. Ello no va en detrimento del maletero, que con 520 litros tiene capacidad suficiente para llevar el equipaje de una familia de cuatro o cinco miembros. Bajo el piso hay un compartimento para guardar los cables de carga (el de serie es un schuko o conector doméstico, aunque es desmontable y el transformador nos sirve para el trifásico opcional), y el portón tiene apertura eléctrica.

Inicialmente había una versión del Q4 e-tron con potencia equivalente a 170 caballos y batería de 51,5 kWh, lo que le daba una autonomía de 340 kilómetros. Pero Audi ofrece ahora la versión Q4 40 e-tron, que aumenta la potencia a 204 CV y la capacidad de las celdas de ion-litio a 77 kWh, con lo que puede recorrer más de 500 kilómetros antes de tener que enchufarlo. Desde que empezamos a rodar nos llama la atención su finura de marcha, con una elevada insonorización y una amortiguación que hace que los desplazamientos sean muy cómodos. A esto también contribuye el tren de rodaje Comfort y los neumáticos de perfil alto que monta sobre llanta de 19 pulgadas. Opcionalmente hay una suspensión deportiva y otra regulada electrónicamente.

Aunque supera los 2.100 kilos, no se nota pesado y sí aplomado en las curvas, donde se desenvuelve con agilidad y nobleza. Es de tracción trasera, acelera de 0 a 100 km/h en 8,5 segundos y puede alcanzar una velocidad máxima de 160 kilómetros por hora.

Los datos de consumo son muy buenos y en ciudad y alrededores podemos movernos fácilmente en una horquilla de entre 12 y 14 kWh/100 km. La potencia máxima de carga son 11 kW en corriente alterna y 135 kW en continua; en el primer caso tarda 7,5 horas en recuperar toda la autonomía y, en el segundo, la batería pasa del 0 al 80 % en solo 29 minutos. La frenada regenerativa actúa de forma inteligente y se puede regular en varios niveles con las levas.

Como SUV, ofrece una altura de la carrocería al suelo superior a la de los vehículos estándar, 18 centímetros, aunque obviamente no es un todoterreno. Viene equipado con faros led —que se pueden convertir en matriciales con una actualización de software—, control de velocidad de crucero adaptativo y asistente de mantenimiento de carril, sensores de párking, reconocimiento de señales, butacas delanteras con calefacción y conexión inalámbrica de Android Auto y Apple Car Play.

El Q4 e-tron está disponible desde 58.700 euros y hay otra versión con tracción total y 299 CV que acelera de 0 a 100 en solo 6,2 segundos.

A pesar de los más de 2.100 kilos de peso, el coche se muestra ágil y muy estable en las curvas