El coche autonómo es más seguro

MOTOR ON

Los coches modernos son más seguros al avanzar hacia la autonomía total e incorporar funciones de seguridad que ya actúan por sí mismas, sin la intervención del conductor. Cámaras, sensores y radares son nuestros ojos

17 dic 2021 . Actualizado a las 14:16 h.

A partir del 2022 todos los coches nuevos que se vendan deberán incorporar nuevos sistemas de seguridad obligatorios. Casi todos ellos utilizan cámaras, radares y sensores para percibir lo que a veces el ojo del conductor no ve. Ahora mismo al comprar un coche nuevo, el vendedor nos asalta con una serie de nombres y terminologías que no siempre comprendemos, pero que son determinantes a la hora de conducir con seguridad. 

Conviene saber cómo vamos a utilizar nuestro coche para elegir entre unas y otras. Por ejemplo, si es un coche con el que vamos a movernos en trayectos cortos y eminentemente urbanos no nos servirá de mucho pagar como opción por un control de crucero adaptativo, que regula la velocidad en carretera adecuándola al tráfico y al trazado. En cambio, en un coche de ciudad, resulta mucho más útil que disponga de sistema de frenada de emergencia, con detección de peatones y ciclistas, que escanea todo lo que se mueve alrededor del coche y anticipa incluso la frenada si el conductor no lo hace a tiempo. Aquello de que cuatro ojos ven más que dos es una verdad que ayuda a salvar vidas. 

Lo mismo ocurre con los sensores de tráfico cruzado que actúan cuando salimos de un aparcamiento en batería marcha atrás y detectan si se acercan coches, frenándonos el vehículo. 

Otros sistemas de seguridad activa interesantes son los que nos mantienen en el carril, en este caso tanto en ciudad como en carretera, algunos de ellos incluso correctivos ya que giran el volante cuando pisamos las rayas y nos vuelven a meter en el sitio. 

Para los que sufran atascos interminables hay sistemas que además de mantenerse en el carril arrancan o frenan el coche cuando la caravana lo hace, sin que el conductor tenga que tocar ningún pedal y ni siquiera el volante. 

En eso se esmeran los fabricantes de automóviles, en que la conducción sea cada vez más autónoma y evitar así los errores humanos. 

También resulta muy cómoda, especialmente para conductores que viajen mucho, la proyección de datos en el parabrisas, cada vez más generalizada e incluso ahora proyectando en realidad aumentada lo que se ve en el navegador. La tecnología nos ayudará a circular en coche con más seguridad y también con mayor comodidad. 

Los coches más equipados son capaces de mantenerse en el carril e incluso de aparcar, aunque el conductor no lleve las manos en el volante
Los coches más equipados son capaces de mantenerse en el carril e incluso de aparcar, aunque el conductor no lleve las manos en el volante -

La seguridad pasiva sigue salvando vidas

Los sistemas de seguridad de los que hemos hablado en la página anterior son los llamados de seguridad activa, es decir, aquellos que evitan que se produzcan accidentes. 

Pero si estos son inevitables, una vez que se produce, sus efectos se pueden mitigar con los sistemas de seguridad pasiva que tienen los coches modernos y que son evaluados antes de su lanzamiento al mercado por un organismo independiente (EuroNCAP). Básicamente la seguridad pasiva se verifica mediante choques (crash test) donde se reproducen las condiciones reales y luego se analizan los efectos. Para ello se colocan dentro del vehículo muñecos articulados (dummies) sobre los que se instalan sensores que miden parámetros de deceleración e impacto para analizar sus efectos. 

Estos crash test son pruebas muy costosas, pero ayudan a salvar muchas vidas. En los últimos años, estas pruebas incluyen a dummies infantiles e incluso el comportamiento de las sillitas de niños. De sus resultados ha surgido el ya obligatorio sistema Isofix de anclaje que antes no existía. 

Otro avance producido por estos crash test son las zonas de deformación de los chasis de los coches, que todos los fabricantes montan ahora y que ayudar a reducir la deceleración que sufren los ocupantes del coche accidentado. Los airbags y el pretensado de cinturones en caso de peligro también se investigaron en estos crash test.