Los presidentes de ambas ciudades ven indispensable un pacto de Estado
28 mar 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Mientras España y Marruecos aplazan su reunión bilateral para abordar el problema de la inmigración clandestina debido al luto por la muerte de Adolfo Suárez, Melilla y Ceuta concluyeron ayer una cumbre en la que reclamaron al Gobierno central y, sobre todo, a la Unión Europea el respaldo urgente para afrontar un fenómeno desbocado que ha colocado a estos enclaves en una situación «insoportable».
Los presidentes de las dos ciudades autónomas se reunieron para «intentar conjugar la guardia y custodia de las fronteras de la Unión Europea en África con la solidaridad, la compasión y la actitud humanitaria hacia los inmigrantes y sus países», según resumió el mandatario ceutí, Juan Jesús Vivas. Ambos creen que las fronteras son necesarias y que deben ser «seguras y respetadas» y para ello Marruecos ha de mantener su colaboración en la lucha contra las mafias que trafican con seres humanos, y Europa debe implicarse más y atender las singulares exigencias, que precisan de una política comunitaria común al respecto. Melilla y Ceuta abogan por un pacto de Estado entre los dos grandes partidos españoles que incluya la actualización de la Ley de Extranjería, para habilitar medidas más eficaces y que ayuden a frenar las avalanchas. Piden ayuda para que los inmigrantes acogidos en los centros de estancia temporal no superen la capacidad de los mismos.
El presidente de Melilla, Juan José Imbroda, anunció que ambos gobiernos apoyarán la moción del PP en el Senado sobre la puesta en marcha de planes integrales para mejorar las fronteras y sus accesos, así como la regeneración del entorno urbano próximo. Los presidentes visitaron los pasos fronterizos que unen Melilla con Marruecos y recorrieron tramos de la valla para comprobar las obras de colocación de la malla antitrepa.
En la cumbre también abordaron la mejora de los incentivos fiscales y acordaron unirse para defender las peculiaridades de los dos enclaves en la revisión de la financiación autonómica.