Bárcenas «no sabe nada de los SMS» a Rajoy, dice su abogado Gómez de Liaño

Agencias MADRID

ESPAÑA

Gómez de Liaño asegura que carece de información al estar encarcelado

14 jul 2013 . Actualizado a las 23:29 h.

El extesorero del PP Luis Bárcenas no sabe nada sobre la publicación de presuntos mensajes de texto telefónicos (SMS) enviados al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado su abogado defensor, Javier Gómez de Liaño.

Así lo ha afirmado el letrado a los periodistas tras visitar a Bárcenas en la cárcel madrileña de Soto del Real, donde se ha trasladado para preparar la comparecencia este lunes del extesorero del PP ante el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz. «Estoy convencido de que Bárcenas no sabía nada porque además no tiene fuente de información al estar encarcelado y este letrado tampoco sabía nada», ha indicado Gómez de Liaño.

El letrado ha negado que Bárcenas tenga algo que ver con esta información alegando que «sigue encerrado» y que, por tanto, «de malas maneras puede haber hecho la filtración». Además, ha indicado que estos hechos «no deberían afectar» al proceso judicial. «A mi como jurista me parece una minucia y estoy seguro de que al juez también», ha apuntado. En este sentido, Gómez de Liaño ha indicado que el caso de los SMS «quizás» podría tener una repercusión en el ámbito político. «Pero ya sabe que los políticos de justicia entienden poco», ha añadido.

«Lo único que le he dicho a Bárcenas es que sea sincero, que confíe en sus jueces y fiscales y que vaya con la verdad por delante» porque «solo con la verdad por delante es como se puede alcanzar la justicia», ha dicho. Gómez de Liaño no cree que este proceso se vaya a convertir en un ataque al Gobierno. A su juicio, esta situación no la consentiría «ni su señoría, ni el fiscal» ni él «como letrado».

Por otra parte, el abogado se ha mostrado «enfadado» después de que el centro penitenciario le negase la entrada a la mujer de Bárcenas con papel y bolígrafo, un hecho que ha definido como «excepcional», por lo que ha mostrado su «más enérgica queja».