No hay otra opción para los presos de ETA mientras la banda no se disuelva y entregue las armas y el Gobierno quiere dejarlo claro, también con los hechos. El Ministerio del Interior, por primera vez, ha tomado la decisión de premiar con la libertad a un recluso terrorista de la denominada vía Nanclares, el colectivo de internos disidentes de la doctrina de ETA que desde principios del 2007 han sido agrupados en la vieja cárcel alavesa tras pedir perdón a las víctimas, romper con la banda, colaborar con la Justicia y hacer frente a las indemnizaciones.
La junta de tratamiento de la vizcaína cárcel de Basauri ha propuesto al juez de vigilancia penitenciaria de la Audiencia Nacional, José Luis de Castro, la concesión de la libertad condicional a José Manuel Fernández Pérez de Nanclares. De aceptar De Castro la petición de Instituciones Penitenciarias, este excolaborador de ETA adelantará su salida de la cárcel más de seis años, ya que no terminaba de cumplir condena hasta mayo del 2018.
José Manuel Fernández fue condenado a 18 años de cárcel (la misma pena que se impuso a su mujer, María Ángeles Pérez del Río) por colaborar en el asesinato del guardia civil José San Martín Bretón en febrero de 1992 en la localidad vizcaína de Guecho.
El Ministerio del Interior ha tenido especialmente en cuenta la evolución penitenciaria de este recluso y lo avanzado de su condena. La Asociación de Víctimas del Terrorismo se mostró en contra de esta primera libertad condicional.