Pero sí podrá ejercer la abogacía o continuar participando en foros internacionales. Durante este tiempo, ha colaborado con el Tribunal Penal Internacional, con la Organización de Estados Americanos y el Comité contra la Tortura del Consejo de Europa. Su futuro, quién sabe, hasta podría pasar por la política, y en la actualidad asesora en materia de justicia a los Gobiernos de Colombia, Ecuador y en breve quizá al de México.
las consecuencias de una condena