El Gobierno desdice a Corbacho al apostar por los contratos en origen

ESPAÑA

El ministro de Trabajo reconoce que erró en su iniciativa porque «uno no es perfecto al explicar las cosas»

06 sep 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El Gobierno da marcha atrás y desdice al ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, quien el pasado miércoles aseguró que «no parece razonable que en un mercado como el español, con 2,5 millones de desempleados, sigamos recurriendo a la contratación en origen». La idea lanzada por Corbacho -que apuntaba a que en el 2009 se limitaría la contratación de extranjeros en su país de origen a los convenios internacionales firmados por España o a contratos de especialización- fue criticada por los partidos de la oposición y los sindicatos.

El Gobierno, en manos de su vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, defendió ayer la eficacia de los contratos en origen a los inmigrantes e incidió en la importancia de que esos trámites se ajusten a las necesidades del mercado laboral. La vicepresidenta aseguró que «el objetivo» del Ejecutivo en esta materia no ha variado y dijo que este es que la inmigración se produzca de una forma «legal y ordenada».

«Vamos a seguir profundizando en esa línea», aseveró la vicepresidenta, quien aseguró que el Gobierno ha buscado «siempre» el equilibrio entre la contratación en origen y las necesidades de la economía y del mercado de trabajo español. «Mantenemos exactamente la misma política de inmigración», dijo la vicepresidenta, y aclaró que habrá «las contrataciones en origen que se necesiten».

Corbacho, obligado a rectificar

Ante las acusaciones de que estaba relacionando la inmigración con la crisis, Corbacho se vio obligado a rectificar. El ministro declaró ayer en la Ser que «uno no es perfecto al explicar las cosas. Nunca he dicho que haya que suprimir las contrataciones en origen porque soy un defensor de ellas».

El ministro añadió que «la crisis no es el resultado de la inmigración, que ha contribuido mucho al desarrollo. Los inmigrantes padecen los efectos de la crisis, no son culpables de ella. Quiero que el inmigrante que se ha quedado en paro encuentre trabajo».