El PIB creció un 0,6 % hasta marzo, por el tirón de las exportaciones y la inversión
23 jun 2023 . Actualizado a las 18:45 h.La economía española comenzó el año con un impulso mayor del esperado, pese a la elevada inflación y la subida de tipos decretada por el Banco Central Europeo. El producto interior bruto (PIB) avanzó un 0,6 % de enero a marzo, una décima más del crecimiento calculado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) en su primera estimación, gracias al impulso de las exportaciones y la inversión.
Gracias a ese avance adicional, la economía española recupera oficialmente el nivel de actividad previo a la pandemia, un hito que, según el INE, no se había alcanzado todavía, lo que chocaba con los valores récord que apuntaban otros indicadores económicos, desde las afiliaciones a la Seguridad Social a la recaudación tributaria.
Medida en términos interanuales, la economía española registró un crecimiendo del 4,2 %, cuatro décimas más de lo previsto por el INE en su primera estimación y 1,1 puntos más que en el último trimestre del año pasado (3,1 %). La vicepresidenta económica, Nadia Calviño, destacó que «España ya ha recuperado el PIB prepandemia y es la economía que más crece de la UE, cuatro veces más que la media». En una valoración remitida a los medios, Calviño indicó que una parte muy importante de este crecimiento se basa en «el dinamismo del empleo», con la creación de 426.000 puestos de trabajo a tiempo completo en el primer trimestre del año.
Pero antes de mirar al empleo, es importante destacar que las exportaciones y la inversión actuaron como los motores del acelerón económico en la primera parte del año. Las ventas al extranjero aumentaron un 9,2 % de enero a marzo, hasta sumar 132.000 millones de euros, máximo histórico. Pero la inversión también está por las nubes (crece un 1,1 % tras dos trimestres a la baja), sobre todo gracias al impulso de los fondos europeos y el enfriamiento de los precios energéticos.
El consumo se resiente
La cara negativa se observa en el consumo de los hogares, que cayó un 1,3 % respecto al último trimestre y refleja la pérdida de poder adquisitivo de las familias por los altos precios y la subida de las hipotecas. Aunque suma dos trimestres consecutivos de retrocesos, el consumo privado creció un 1,6 % respecto al mismo período del año pasado.
El gasto público, además, se contrajo un 1,6 %, el mayor descenso desde finales del 2021, aunque a nivel anual crece un 1,4 %, 1,1 puntos más.
El director general de Economía del Banco de España, Ángel Gavilán, apuntó hace unos días a un cierto «enfriamiento» de la economía durante el segundo trimestre del año, sobre todo por los elevados precios que lastran el consumo y provocan que las familias no noten aún la mejoría de las cifras macroeconómicas. Pese a ello, el supervisor vaticinó que la economía podría llegar a crecer otro 0,6 % de abril a junio (la AIReF apunta más alto, hasta el 0,7 %) y que el PIB avanzará un 2,3 % este año, dos décimas por encima incluso de las estimaciones del Gobierno. Son previsiones similares a las que están dando otros organismos como BBVA Research (2,4 %) o la OCDE (2,1 %).
Más horas trabajadas
Y es que, además del tirón de las exportaciones y la inversión, el crecimiento económico se asienta sobre una mejoría generalizada del mercado de trabajo. Y es que los datos del INE indicaron que las horas trabajadas aumentaron en el primer trimestre un 0,4 % respecto al último cuarto del 2022 y un 1,4 % respecto al mismo período del año anterior. Por sectores, es la industria, donde más aumenta la ocupación, con un repunte del 2,3 % en el tiempo de trabajo efectivo, frente al 1,5 % de los servicios y el 0,2 % de la construcción, lo que apunta a un giro de la economía española hacia sectores de mayor valor añadido. Si se mide el avance del empleo en puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo (esto es, transformando las horas en jornadas completas), el INE apunta a un incremento del 2,3 %, tres décimas más que en el cuarto trimestre, lo que supone que en un año se han creado 426.000 empleos a tiempo completo.
UGT exige mantener el apoyo fiscal a los hogares
Aunque el PIB progresa, aupado por las inversiones y la exportación, lo cierto es que el consumo de las familias se está contrayendo, a causa de la fatiga inflacionista. Por eso, el sindicato UGT ha exigido al Gobierno que se comprometa a mantener el apoyo fiscal a los hogares: «Los datos muestran una aceleración de la economía. Sin embargo, el consumo no se ha recuperado porque los precios siguen creciendo y porque el endurecimiento de la política monetaria lastra el crédito», expone el sindicato en un comunicado.
Francia se encamina a una recesión, con la actividad privada en su nivel más bajo en dos años
El acelerón de la economía española contrasta con el frenazo de las dos grandes locomotoras de la Unión Europea. Con Alemania oficialmente en recesión técnica tras la revisión a la baja del PIB del primer trimestre, ahora es Francia la que parece abocada a la crisis tras registrar una severa contracción en la actividad del sector privado en junio.
Así, el índice compuesto de gestores de compra (PMI) ha bajado hasta 47,3 puntos desde los 51,2 de mayo (los valores por encima de 50 muestran expansión y, por debajo de esa barrera, contracción), lo que supone el peor registro en 28 meses y sugiere una caída del PIB de la segunda economía del euro entre abril y junio.
El empeoramiento de la actividad de las empresas francesas refleja el persistente deterioro del sector manufacturero, con una lectura del PMI de 45,5 puntos, en mínimos de 37 meses, pero también en el sector servicios, con un PMI de 48 enteros, frente a los 52,5 de mayo. «Según nuestro modelo, esto resulta en un crecimiento negativo del -0,5 % trimestral» del PIB, advirtió Norman Liebke, economista de Hamburg Commercial Bank (HCB). Esa caída de medio punto que se espera ahora en la economía francesa choca con la previsión inicial, que apuntaba a un estancamiento durante el trimestre.
Ese mismo indicador del PMI también muestra un enfriamiento en la actividad del conjunto de la eurozona, aunque todavía en tasas de crecimiento, con una lectura de 50,3 puntos, frente a los 52,8 del mes anterior. El dato, en cualquier caso, anticipa para los expertos «un segundo semestre del año arduo, puesto que las firmas de todos los sectores se enfrentan al creciente deterioro de las carteras de pedidos».