Río monta una planta pionera de leche concentrada en Lugo ante la caída del consumo

Dolores Cela Castro
Dolores Cela LUGO / LA VOZ

ECONOMÍA

Con este sistema, la empresa de Jesús Lence pretende vender la producción a otras compañías para fabricar quesos y yogures

20 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Leche Río está montando en su planta de Veiga de Anzós, en el concello lucense de Láncara, una planta de ósmosis inversa en la que fabricará leche concentrada para vendérsela a industrias del sector que se dedican a la elaboración de quesos, yogures y otros productos que requieren fermentación. La capacidad de esta nueva instalación será de 30.000 litros a la hora, lo que permitirá obtener 25.000 litros de concentrado al 33 %. Es la primera planta de este tipo que se pone en marcha en Galicia, según señaló ayer Jesús Lence, consejero delegado de Leche Río.

La factoría, que está en pleno proceso de montaje, entrará en funcionamiento dentro de unos tres meses, según las previsiones de la propia industria. «Haremos -señaló el empresario lucense- leche concentrada a la carta, en función de las necesidades del cliente y del producto para el que la vaya a usar».

El industrial reconoció que la inversión en marcha es consecuencia de los resultados de un estudio de mercado sobre las posibilidades de la leche concentrada, no solo en España, sino también fuera de las fronteras nacionales. Canarias e Italia figuran entre los futuros destinos de este producto que se elaborará en la factoría de Láncara, que es la más antigua de las cuatro que tiene el grupo. Lence admitió también que esta inversión es la respuesta de su compañía a la situación de un mercado, en el que el consumo de leche en UHT descendió solo el pasado ejercicio un 4%. «Este año -apuntó el empresario- no parece que se vaya a recuperar. Los resultados de marzo fueron malos en ventas, incluidas las marcas blancas».

Para poder instalar el proceso de ósmosis inversa en la planta que dio origen a Leche Río han tenido que retirar un esterilizador y dos llenadoras, que han sido trasladados a la planta Ceao II, en Lugo, donde estarán operativas. Tienen una capacidad para envasar 13.000 litros a la hora, en botellas de litro y medio.

El sistema que implantará Lence replica otro que ya funciona en Dinamarca. El concentrado de leche que ofrecerá la compañía a las industrias queseras y yogurteras es pasteurizado. El proceso, el primero que se desarrolla en Galicia de estas características, permite emplearlo en cualquier otro procedimiento que requiera de fermentación. «Lo están usando para evaporación -explicó Lence-, pero no sirve para la elaboración de yogures. El nuestro es diferente porque no pasa de una temperatura de 76 grados, con lo que mata los patógenos pero mantiene la flora activa, lo que no se consigue con la evaporación».

Ante el fin de las cuotas

Con la entrada en funcionamiento de la planta de fabricación de leche concentrada en Láncara, el industrial lucense se adelanta a otras iniciativas similares que se barajan en la provincia de Lugo, coincidiendo con la desaparición de las cuotas lácteas y con un posible incremento de la producción como consecuencia de la eliminación de las limitaciones impuestas por Bruselas.

En el parque empresarial de Rábade, los asturianos de CLEA están pendientes de recibir las autorizaciones municipales para la puesta en marcha de una línea de fabricación de leche en polvo de uso infantil. Su capacidad de fabricación, según reconocieron recientemente fuentes de la empresa, es de 16.000 litros a la hora. Las obras de ampliación del antiguo centro de recogida de Puleva, que es donde se asienta la industria, están paralizadas a la espera de los permisos municipales.

La leche concentrada no es la única apuesta de Leche Río ante un nuevo e incierto escenario para el sector, que se quedará sin cuotas de producción a partir de la próxima campaña, que empieza dentro de dos semanas. El departamento de I+D+i del grupo empresarial diseñó una línea nueva de leche con 0 % de materia grasa y sin lactosa, que fabrican desde hace tres meses en la planta que Leyma tiene en Arteixo (A Coruña). La capacidad de producción en este caso es de 5.000 litros de leche a la hora, en botellas de litro.

Mercado canario y madrileño

Por el momento, la apuesta se centrará en el mercado gallego, pero los planes pasan por promocionar también el producto en Canarias y en Madrid.

El consejero delegado de Leche Río explicó que este nuevo tipo de leche, más ligera, está dirigida a consumidores que tienen necesidad de tomar este alimento básico y problemas de absorción del calcio. Insistió en que nace de una demanda previa.

El industrial lucense reconoce que este tipo de leche permite, además, sacar un importante volumen al mercado. «Leche de vaca -puntualiza-, no sucedáneos».