Marta Fernández Currás: «No hay margen para subir más las pensiones, pero nunca las congelamos»
ECONOMÍA
Asegura que «siempre habrá dinero para el desempleo» aunque se ha recortado en un 15 %
05 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.Las cuentas que consolidarán la recuperación. Ese es el mensaje en el que insiste la secretaria de Estado de Presupuestos y Gastos, Marta Fernández Currás (Vigo, 1963), sobre los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el 2015, que el martes llegaron al Congreso. Rechaza las críticas de quienes los consideran -por las previsiones de crecimiento de la economía en un entorno europeo sin pulso y por la estimación de ingresos- optimistas en exceso, y subraya que aunque aún están marcados por la consolidación fiscal para cumplir el objetivo de déficit, impulsarán la actividad y el empleo, sin descuidar la protección de los más vulnerables: pensionistas y parados.
-¿Son presupuestos con las citas electorales del 2015 en mente?
-No. Los del 2014 eran para la recuperación. Y así fue, porque en el 2013 cerramos con un decrecimiento del ?1,2 % y en este ejercicio lo haremos con un crecimiento del 1,3 %. Pero queremos más, por lo que los del 2015 están pensando en la consolidación de esa recuperación e introducen mecanismos de estímulo suficientes para volver al crecimiento que hemos conocido antaño. Estamos convencidos de que creceremos al 2 %: consolidación de la recuperación.
-¿Se pueden considerar no expansivos pese a que contemplan una emisión de deuda neta de 47.000 millones? Y ya tenemos una deuda del 100 % del PIB...
-Sí. Pero hay que pensar un poco en la historia de nuestra deuda pública. Efectivamente, desde el 2007 debemos tener unos 68.000 millones más. De ellos, el 63 % aproximadamente corresponden al Gobierno anterior. Este Gobierno ha seguido incrementándola porque la situación económica lo requería, porque hemos tenido que arreglar todas las cuentas nacionales, no solo el Presupuesto del Estado. Y se han introducido muchos conceptos en la deuda pública que antes no estaban reconocidos, como las facturas de los proveedores. No podemos olvidarnos tampoco de los más de 40.000 millones que supuso el rescate bancario, absolutamente necesarios para que la economía volviese a funcionar. Son muchas razones.
-De acuerdo, pero en los presupuestos del 2105 se emiten 47.000 millones más...
-Creo que nos tenemos que centrar en la buena noticia, que estamos hablando de 47.000 millones de deuda neta y que el año pasado fueron 55.000, por tanto estamos cumpliendo nuestros objetivos, reflejados en el programa de estabilidad presupuestaria, donde, a partir del 2016 -y creo que es lo importante-, este esfuerzo conjunto nos lleva a tener superávit primario, es decir, a tener más ingresos que gastos, descontado el efecto de la carga financiera de la deuda.
-La crítica unánime es que la previsión de ingresos es optimista en exceso. Incluso el gobernador del Banco de España alertó sobre ello. ¿Cómo lo defiende?
-El crecimiento de los ingresos está proyectado teniendo en cuenta su comportamiento actual. Llevamos todo el año con crecimientos del 5-6 % porque se han puesto en marcha muchas medidas de carácter estructural. Me refiero a todas las adoptadas en la lucha contra el fraude, al ensanchamiento de bases imponibles que se ha producido como consecuencia de la declaración tributaria especial, a la regularización de la economía no formal que está habiendo... Por tanto, pensar que en el año que viene, con un crecimiento nominal del 2,7 %, vamos a tener una recaudación similar no nos parece irreal.
-En Galicia preocupan especialmente las pensiones. ¿Realmente no habría forma de subirlas más que el mínimo legal? Un 0,25 % es el precio de un café...
-La buena noticia es que las pensiones suben. Creo que la de regular un factor de sostenibilidad ha sido una reforma necesaria, con una garantía de actualización constante que da estabilidad al sistema de pensiones presente y futuro. El Gobierno ha mantenido su compromiso con los pensionistas. No hay margen para subirlas más, pero nunca hemos congelado las pensiones.
-Sí, pero insisto, la revalorización es el equivalente a un café. ¿Entiende que los pensionistas estén dolidos cuando ven los casos sangrantes de corrupción o las tarjetas VIP de Caja Madrid?
-Es que eso nos indigna a todos. A todas las personas que contribuimos para los que no tienen. Pero insisto en que no hay inflación y, por tanto, tampoco pérdida de poder adquisitivo.
-¿La inversión en Cataluña es un castigo al independentismo?
-Evidentemente no. Pero hay que pensar también en la solidaridad interregional.