La prima de riesgo baja de 200

mercedes mora REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Los mercados parecen haber dejado atrás lo peor de la tormenta.
Los mercados parecen haber dejado atrás lo peor de la tormenta. daniel roland < / span>afp< / span>

Vuelve a los niveles previos a la rendición de Portugal, en abril del 2011

04 ene 2014 . Actualizado a las 12:09 h.

España ha recuperado la confianza de los inversores. O eso al menos es lo que certifica el espectacular comienzo de año con el que nos ha obsequiado la prima de riesgo, objeto de casi todos nuestros desvelos hace no mucho. El jueves estuvo a punto de hacerlo. Y ayer lo consiguió: apearse del listón de los 200 puntos.

¿A qué se debe la mejora?

A una oleada de compras procedente tanto de inversores extranjeros como nacionales. Confían en la recuperación de la economía patria y no quieren perder el tren. Por eso están aumentado el peso de la deuda española en sus carteras. En detrimento de otras más seguras como la alemana. Los bonos periféricos, tremendamente castigados durante los peores episodios de la crisis, tienen ahora recorrido al alza. Pueden deparar más de una alegría. Se han convertido en un producto seguro, con rentabilidades interesantes. Mientras que los germanos, refugio durante la tormenta, están agotados. Ya no hay más que rascar en ellos.

En el caso concreto de España se espera, además, que las agencias de calificación le levanten el castigo y le mejoren algo la nota. No será de manera inmediata. Standard & Poor's ya ha dicho que no hará público su veredicto hasta mayo.

¿Desde cuándo no veíamos la prima de riesgo por debajo de los 200 puntos?

Desde hace más de dos años y medio. En concreto desde principios de abril del 2011. Unos días antes de que Portugal tirara la toalla y pidiera el auxilio de sus socios, convirtiéndose en la tercera ficha del dominó en caer (primero lo hicieron Grecia e Irlanda) y certificando el contagio.

¿Qué rentabilidad se le exige ahora a los bonos españoles en el mercado secundario?

En el caso de los bonos hay que remontarse más en el tiempo para encontrar rentabilidades como las actuales (ayer se le exigía un rendimiento del 3,88 %). Hasta mayo del 2010. De hecho, está a un paso de recuperar los niveles en los que se movía antes del rescate de Grecia. El origen de todo el sufrimiento.

¿Qué niveles se alcanzaron en lo peor de la tormenta?

En julio del 2012, los inversores llegaron a exigirle la friolera de un 7,75 % al bono español a diez años. Aquello puso a España contra las cuerdas, con la prima de riesgo a un paso de los 650 puntos. Hizo falta la aparición estelar del presidente del BCE para que las aguas se calmaran. Solo Mario Draghi, con el famoso conjuro que profirió en Londres aquel mes: «Haremos todo lo que sea necesario para preservar el euro. Y, créanme, será suficiente», consiguió pararle los pies a la jauría de especuladores, regalándole con ello un tiempo precioso al Gobierno de Rajoy para poner en orden las cuentas. Hoy prácticamente todo el mundo reconoce que España ha hecho buena parte de los deberes que se le encomendaron. A costa, eso sí, del sufrimiento de los ciudadanos.

¿Ha pasado ya lo peor?

Esa es la opinión mayoritaria entre los analistas. Ahora bien, recuerdan que queda un largo y tortuoso camino por delante para que los países de la periferia, España entre ellos, consigan cerrar la brecha que separa sus bonos de los alemanes, inexistente prácticamente antes del huracán. Si es que alguna vez lo lo logran. Y advierten que cualquier traspié puede ser demoledor. Si los mercados vuelven a dudar del euro, España estaría ahora en una situación más vulnerable que antes: su deuda supera el 100 % del PIB y eso podría suponer la puntilla para el país si la crisis se recrudece.

De momento, el Gobierno puede sacar pecho y presumir de que ha salvado a España de la pesadilla de un rescate total. Solo tuvo que pedir 100.000 millones de euros (de los que, al final, uso 42.000) para salvar su sistema financiero. Pero en esta crisis nadie se atreve a afirmar que los mercados hayan dicho ya su última palabra.