Tienen un plazo de 40 días y alegan contra Damm conflicto de intereses
13 sep 2013 . Actualizado a las 15:16 h.«Anuncio que casi con toda seguridad esta junta general será impugnada, pues no se están respetando lo que algunos entendemos reglas del juego». Vía Twitter y aún en curso la asamblea, el abogado Javier Cremades, también secretario general de la Asociación Española de Accionistas Minoritarios de Empresas Cotizadas (Aemec), anunciaba así su disconformidad con el desarrollo de la junta, de la que Pescanem, el tándem formado por los minoritarios de Pescanova (aglutinan el 3 % de capital) y el fondo Cartesian (5 % de los títulos), fue la gran perdedora. Su candidatura para el nuevo consejo de administración ni siquiera llegó a votarse.
Horas después, Ignacio Aragón, asociado del despacho Cremades & Calvo-Sotelo y portavoz de Aemec, matizaba que Pescanem se había reservado la posibilidad de impugnación tanto del acuerdo sobre el consejo como de la junta en general y que ahora estudiarán si presentarla. Disponen para ello de un plazo legal de 40 días.
«No queremos perjudicar a la compañía, pero tampoco a los pequeños accionistas», insistió Aragón. Explicó que la disconformidad expresada por Pescanem durante la junta obedece a varias razones. Por un lado, consideran que el consejo de administración aprobado -la candidatura de Damm- podría incurrir en un «conflicto de interés» por parte del representante de la corporación catalana, ya que ambas empresas operan en el sector de la alimentación.
«No importa que Carceller haya sido consejero hasta ahora. Creemos que ese conflicto de interés existe y que debería haberse puesto de manifiesto antes», apuntó.
Sustitución «estética»
Otro argumento de los minoritarios para cuestionar la validez del consejo es que consideran que la dimisión de José Antonio Pérez-Nievas como representante de Iberfomento 48 horas antes de la junta es únicamente una medida de «estética», ya que su sustituto en la mesa de la pesquera, Fernando Harce, es «su mano derecha». Recuerdan que Pérez-Nievas está imputado por diversos delitos junto con Fernández de Sousa o Paz Andrade en la Audiencia Nacional, y debe hacer frente a una fianza civil millonaria (54,7 millones de euros), lo que «lo inhabilita» en el órgano de representación.
También se suman a lo denunciado por el ex consejero delegado de la empresa Alfonso Paz Andrade respecto a los lazos empresariales que unen a François Tesch, consejero en representación de Luxempart, con el expresidente de la multinacional gallega.
Sin cambios en el control
«Los que antes tenían en sus manos el control de la empresa siguen teniéndolo ahora de otro modo», añadió Aragón, para apuntar que igualmente habían reseñado en el acta notarial su disconformidad con cómo se desarrolló la junta y el modo en el que el presidente decidió que se votara. «Ha sido de una forma anormal», sentenció.
Por contra, alabó el comportamiento de los accionistas personados en Chapela. «La asamblea ha sido muy calmada, algo sorprendente para bien. Pero precisamente ese comportamiento tan educado y respetuoso no se ha visto correspondido», afeó el portavoz de los minoritarios.