Ofensiva de los empresarios gallegos en NCG en defensa de su inversión y del proyecto
ECONOMÍA
El principal objetivo no es recuperar el capital inyectado en el banco, sino mantener y consolidar su participación
23 nov 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Santiago fue el escenario. Los empresarios gallegos que apostaron por NCG y sus representantes legales se reunieron ayer para analizar los distintos escenarios que se abren en defensa de una inversión y un proyecto que, desde un primer momento, desde todos los círculos políticos, sindicales y sociales, se consideró vital para Galicia.
La inversión realizada fue de 70,68 millones, que se destinaron a comprar acciones al propio Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, el primer accionista de la entidad con más de un 90 % del capital, y al pago de intereses. Para ello se les entregó un cuaderno de venta que, pocos meses después, quedó claro que no reflejaba la imagen fiel de la entidad, lo que demuestra el hecho de que, con el visto bueno de las autoridades económicas del país, se levantase el asiento de fusión para volver a provisionar 1.650 millones. Por ello, el principal objetivo de la reunión de ayer era concretar entre los empresarios y sus asesores legales las propuestas más viables y los mecanismos de defensa más convenientes ante una situación que tiene un claro componente de dolo.
Asesores legales de los empresarios están evaluando varias fórmulas para afrontar el problema, entre las que destaca la presentación de una demanda individual o seguir trabajando con los máximos representantes del FROB para buscar una solución satisfactoria y ajustada a Derecho. Sea cual sea la acción legal que se adopte, los abogados consultados insisten que los inversores tienen como principal objetivo, no recuperar el dinero, sino consolidar y mantener una inversión en un proyecto por el que se lleva luchando hace ya más de cinco años. De forma paralela, la dirección del banco sigue trabajando en la viabilidad del proyecto.
El día 28 se conocerá el plan de capitalización de NCG, y, en caso de aprobarse como entidad puente, la inyección del dinero europeo entraría antes de final de año. Con este horizonte, los plazos comienzan a agotarse y urge una solución por parte del Banco de España y del FROB, propietario y vendedor de unas acciones de la entidad a un valor que no era el real.
Entre los inversores están tanto empresarios a título individual como grupos, quienes apoyaron una inversión al considerar que el proyecto era vital para la comunidad, y en el que, de acuerdo con los planes presentados ante las autoridades económicas, tenían un claro interés en entrar grandes fondos internacionales (anglosajones y norteamericanos). Los continuos cambios de la situación económica han dado ya varios vuelcos no solo al proyecto gallego, sino a toda la reestructuración bancaria del país.