Entregaron ayer en los juzgados una carta a los magistrados que llevan su demanda de ejecución hipotecaria. Piden la paralización del proceso de desahucio
20 nov 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Los vigueses Verónica Torrón y Francisco Rodríguez, a punto de perder sus respectivas casas, entregaron ayer en los juzgados, como en Barbanza y O Porriño, una carta a los magistrados que llevan su demanda de ejecución hipotecaria. Piden la paralización del proceso de desahucio para no quedar en la calle.
Verónica es madre de dos niños y lleva parada cinco años, lo que le sitúa dentro de los requisitos para obtener una moratoria. Compró un piso en la calle Quintela cuando ganaba 900 euros al mes, pero, al llegar la crisis, tuvo que recurrir a ayudas familiares para ponerse al día en las cuotas. Sin embargo, los intereses de mora y las costas del proceso se convirtieron en una losa. «No nos dejan arreglar lo de los intereses, lo que buscamos es no perder el piso. Ya pedimos ayuda para comer, tengo dos niños de 2 y 4 años, tuvimos que vender el coche», dijo a la puerta del juzgado.
El otro hipotecado que quiso frenar la ejecución es Francisco Rodríguez. El banco subastará el 50 % del piso en unos días. «Mi hijo dejó de pagar las cuotas, debía 25.000 euros y puse 23.000 pero aún debo 7.700, de los que 3.000 son a una financiera que no existe y 4.000 por gastos del proceso», relató.
316 demandas en Vigo
En lo que va de año, los bancos de Vigo han presentado 316 demandas de ejecución hipotecaria, una por día. El ritmo se mantuvo en las últimas semanas cuando el Gobierno abordó el problema.