Fiscalizará toda la gestión del banco, de la caja fusionada y de Caixa Galicia y Caixanova para detectar cualquier perjuicio y denunciarlo
08 sep 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Novagalicia Banco ha decidido no mirar exclusivamente hacia delante (y tiene un complejo futuro), sino también hacia atrás. El enorme estruendo generado por la comercialización de las participaciones preferentes a cargo de Caixa Galicia y Caixanova (el germen del banco actual) y por las abultadas indemnizaciones de varios de sus dirigentes, sumado a algunas «sorpresas» que se ha ido encontrando el equipo gestor en estos últimos meses, ha llevado a la dirección de la entidad a «revisarlo todo». De esta forma se lo explicó ayer el secretario del consejo de administración, Francisco Serna, a todos los sindicatos en una reunión matinal. Ese acuerdo se tomó en un consejo del pasado julio.
Ese «todo» incluye fiscalizar las actuaciones de directivos que aún están en el banco, gestiones realizadas en Novacaixagalicia (la caja que llevó el negocio financiero entre diciembre del 2010 y septiembre del 2011) y también lo sucedido durante años en Caixa Galicia y en Caixanova. Incluyendo a altos cargos que ya no están. Se llegará hasta donde se pueda, les vino a decir Serna a los sindicatos. Todo lo que se encuentre y que tenga visos de irregularidad, de haber perjudicado al actual banco, se trasladará a la Justicia para que «depure responsabilidades». «Comienza una nueva etapa», explicó posteriormente el banco en una nota. «Es algo que llevábamos pidiendo los sindicatos desde hace tiempo», explicaban algunos de los asistentes a ese encuentro con Serna.
Acuerdos a punto de caducar
De entrada, el banco ha decidido revisar todas las indemnizaciones percibidas por directivos en los 12 últimos meses. Empezando por las de los tres altos exdirectivos de Novacaixagalicia: José Luis Pego, Óscar Rodríguez Estrada y Gregorio Gorriarán. El banco decidió presentar ayer una demanda ante el Servizo de Mediación, Arbitraxe e Conciliación (SMAC) de la Consellería de Traballo para tratar de llegar a un acuerdo con ellos y que devuelvan sus pagos.
La cantidad solicitada se ignora. Por esas millonarias indemnizaciones hay una denuncia ante la Audiencia Nacional. En esta se indica que Pego tendría que devolver 1,4 millones de euros (tenía un blindaje de 7,7 millones). Rodríguez Estrada tendría que reintegrar 260.000 euros (con un blindaje de casi 700.000 euros). Y Gorriarán, algo más de 900.000 euros (su blindaje era de 4,8 millones). NCG no ha precisado si lo que reclama es lo mismo que la Audiencia Nacional (2,6 millones de euros en total) o si son las cantidades íntegras del blindaje (13,2). La diferencia es significativa. Aparte, cada uno de ellos tiene unos sustanciosos planes de pensiones, hoy en el aire.
¿Por qué empezar con ellos? Porque los acuerdos laborales tienen 12 meses de vigencia, y luego prescriben. Y José Luis Pego (ex director general de la caja), Óscar Rodríguez Estrada (responsable de la oficina de la fusión) y Gregorio Gorriarán (responsable de la división inmobiliaria de Novacaixagalicia) se fueron de la entidad hace justo un año. El lunes vencen esos 12 meses, según la explicación a los sindicatos. Si no hay acuerdo con ellos con la conciliación, se acudiría a una denuncia ante el Juzgado de lo Social. Lo previsible es que Gorriarán sea el primero en pasar por el SMAC.
Hay un cuarto ex alto directivo, Javier García de Paredes, que, según fuentes consultadas, no está llamado ante el SMAC. Él y la dirección del banco habían llegado a un acuerdo para renunciar a parte de la indemnización. Según la denuncia de la Audiencia Nacional, no puede cobrar de una sola vez 5,2 millones (su blindaje era de 5,1, más un millón por compensaciones). El directivo capitalizó toda su indemnización, a propuesta del banco, para que la entidad se ahorrara, entre otros gastos, una póliza de seguro. García de Paredes salió desde NCG Banco, no desde Novacaixagalicia, y en el comunicado público del banco se habla, exclusivamente, de dirigentes de esta última entidad. Con todo, el banco no ha revelado nombre alguno.
Tras estos tres casos, el banco revisará también los pagos a altos directivos que se fueron meses después de la conversión de la caja en banco. Hay casos de pagos de dos millones de euros.