Aún hay quien se compra una vivienda

Sara Cabrero
SARA CABRERO REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Desde enero se han cerrado 982 operaciones, frente a las 3.300 de hace cuatro años

13 ago 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

El mercado inmobiliario se hunde en Galicia. La compraventa de viviendas descendió un 20 % con respecto al año anterior y en lo que va de año solo se han cerrado 982 operaciones , una cifra que sigue descendiendo y que tiene su peor cara en las agencias inmobiliarias. Algunas tan solo han colocado un piso en lo que va de año. Hace 4 años el número de operaciones a estas alturas superaba las 3.300.

Y mientras el mercado se ahoga, todavía hay quien decide embarcarse en la aventura que supone adquirir una vivienda en plena crisis. Julio Mitchell y su pareja, Dalila Casais, forman parte de ese escaso grupo de que han decidido afrontar la inversión de su vida. «Nosotros estábamos en un piso de alquiler, encontramos una buena oferta y nos decidimos a dar el paso. Lo que finalmente nos animó fue el precio del inmueble», declara Mitchell. Este hombre de 29 años asegura que buscando mucho, buceando por Internet y moviéndose por diferentes inmobiliarias se pueden encontrar grandes ofertas que se adapten a lo que cada uno quiere. Y así, buscando, encontraron su piso en el centro de la ciudad de A Coruña, un inmueble de entre 80 y 90 metros cuadrados con un precio que rondaba los 100.000 euros.

Los responsables de las inmobiliarias aseguran que es el miedo y la incertidumbre lo que impide a muchos consumidores lanzarse a invertir en inmuebles. «Cuando los compradores se atreven a dar el paso es porque se trata de una muy buena oportunidad», explican fuentes del sector, y aseguran que desde hace ya unos años el mercado de grandes casas y terrenos a las afueras de las ciudades -cuyo precio resulta menos atractivo que los de los pisos- se encuentra totalmente parado.

«Lo que se vende son básicamente cosas muy económicas, pisos en el centro de la ciudad que se encuentren entre los 70.000 y los 80.000 euros», explican en la inmobiliaria coruñesa Inmoforum, quienes además aseguran que en este momento su principal cliente es el inversor que busca sacar una rentabilidad a través del alquiler.

También inversores

José Manuel Louzao adquirió tres pisos en Ferrol a principios de año, viviendas «pensadas para alquiler provisional de estudiantes o militares», con una superficie de unos 60 metros cuadrados. «La repercusión de lo que me cuesta hacer frente a una inversión de este tipo frente a la rentabilidad que me produce alquilar los inmuebles es muy positiva», explica este comprador.

Los inversores como Louzao aseguran que para aquellos que posean dinero para hacer frente a este tipo de operaciones este es un buen momento, ya que los precios y las ofertas ayudan a lanzarse. «En toda inversión inmobiliaria existe un riesgo, y este es bastante elevado, pero la inversión que yo hago ya me está reportando algo bueno en este momento, el alquiler funciona. Y además tengo la ilusión de que a un plazo medio se pueda revalorizar el patrimonio que compré», explica este inversor de Ferrol.

Las esperanzas de que el sector empiece a remontar son pocas entre los dueños y trabajadores de las inmobiliarias. «Esto nunca va a volver a ser lo que fue», señalan en las inmobiliarias; pero muchos de los actuales compradores esperan que el esfuerzo económico que han realizado tenga sus frutos en un futuro cercano.