Caixa Catalunya proclama que el negocio inmobiliario ha tocado fondo y pronostica su recuperación
01 dic 2009 . Actualizado a las 03:12 h.Un 40% de las familias aspirantes a comprar una casa mediante una hipoteca tienen cerradas las puertas de las entidades financieras, según un estudio de Caixa Catalunya. Hace un año, ese porcentaje era del 60%. La reducción en el número de excluidos tiene su razón de ser en la caída de los precios -de un 9% interanual según fuentes oficiales, que se eleva de forma considerable según las zonas y los tipos de casas- y, sobre todo, en el recorte de los tipos de interés.
La caja catalana basa sus datos en el denominado esfuerzo financiero, el porcentaje de renta bruta que se llevaría una hipoteca media. Un crédito, apunta la entidad, para adquirir un piso de 90 metros cuadrados en el mercado libre mediante un préstamo por el 80% del valor de tasación a 25 años de plazo, con un tipo de interés también medio, según las bases de datos del Banco de España.
En este escenario, estos cálculos determinan un grado de esfuerzo que para cuatro de cada diez familias interesadas en comprar supera la cifra maldita del 33%. El nivel máximo de riesgo que bancos y cajas están dispuestos a soportar.
Por encima de esa ratio, la respuesta es clara: no hay crédito.
Lejos del pesimismo, el Servicio de Estudios de Caixa Catalunya aprecia un cierto cambio en el panorama, hasta ahora congelado. De hecho, el responsable de la división inmobiliaria, Eduard Mendiluce, asegura que la caja ha comenzado a elevar -de forma muy moderada- el precio de algunas de sus promociones. La subida es del 3% o el 5%, dice. Aunque en realidad no es tal bajada, sino un menor descuento. Ese repunte llega en las zonas, que las hay, afirma la caja, en las que el stock de pisos comienza a diluirse. Según Mendiluce, «el ajuste va por barrios», pero en algunos, añade, ya ha tocado fondo.
Esas zonas donde la demanda y la oferta comienzan a tocarse son el País Vasco, Asturias y La Rioja. En cambio, otras comunidades como Murcia, Castilla-La Mancha o Andalucía, aún hay miles de pisos que no encuentran comprador. Caixa Catalunya estima que el stock real se sitúa entre 645.000 y 959.000 viviendas o, lo que es lo mismo, ente un 2,6% y un 3,8% del total del parque español.
En su informe, la caja advierte del elevadísimo grado de endeudamiento derivado del ladrillo, y asegura que el desapalancamiento de las familias, en máximos históricos, tardará años en atenuarse. La deuda bruta de los hogares en proporción a su renta está en el 131% y deberá, apunta Mendiluce, caminar hacia ratios del 100%, en el que ya se encuentran países como Alemania o Francia.
El Instituto Galego de Estadística hizo público ayer la encuesta sobre condiciones de vida de las familias gallegas, referida al 2007. En el año en el que estalló la crisis de Estados Unidos, el 20% de los hogares gallegos tenían hipotecas que pagar. El gasto medio mensual ascendió a 463 euros. De la estadística también se extrae que hace dos años el 14,6% de la población vivía en situación de riesgo de pobreza relativa en Galicia. No es que apenas tuviese para comer, sino que al hacer la media de ingresos, en consideración al número de personas que integraban la unidad familiar, no se llevaban a casa más de 603 euros, en el caso de los hogares unifamiliares, 904 si convivían dos adultos y 1.200 si se trataba de una pareja con dos hijos.