Más de medio centenar de gallegos que rechazaron hasta cinco ofertas por teléfono han dejado de ser concebidos como demandantes de un puesto
05 mar 2004 . Actualizado a las 06:00 h.La polémica está servida. Comisiones Obreras ha enviando una carta a la Xunta en la que denuncia que la Administración gallega incurre en irregularidades en el cómputo de parados. Según la misiva del sindicato, Asuntos Sociais remitió una circular a las oficinas del Servicio Galego de Colocación para que todos los desempleados que recibieran hasta cinco ofertas telefónicas de disponibilidad para trabajar y las rechazaran, fueran incluidos en la denominada clave 43. Un código según el cual, el parado pasar a ser demandante de servicios externos del Inem y deja de participar en las políticas activas de empleo. Comisiones Obreras advierte de que esta actuación es irregular porque no existe constancia fehaciente de que se ha producido una oferta real de trabajo. «Lo lógico sería que al parado se le enviara un escrito con acuse de recibo porque el nuevo mecanismo es impreciso; incluir al parado en la clave 43 equivale a una sanción, que se realiza sin audiencia previa, lo que contraviene el marco legal vigente», afirma Enrique Negueruela, de CC.OO. El sindicato denuncia que ya ha recibido numerosas quejas de parados que, sin darse cuenta, han visto cómo cambiaba su condición. Comisiones considera que, tras esta estrategia, hay una intención de adelgazar las cifras reales de desempleados. Otra versión Consultada sobre estas quejas, Asuntos Socias ofrece una explicación muy diferente. La consellería admite la existencia de esta circular enviada a las oficinas de empleo, pero advierte que afecta a aquellas personas que, en sólo nueve meses, han rechazado hasta cinco puestos de trabajo. Lejos de concebir esta actuación como irregular, la Xunta explica que «demuestra que la Administración gallega se preocupa por resolver los problemas». Asuntos Sociais, además, advierte que la denominada clave 43 significa que el desempleado pasa a recibir servicios de orientación laboral, pero que en ningún caso deja de ser beneficiario de las políticas activas, es decir, la percepción de ofertas laborales y de cursos de formación. Sin embargo, esta versión de la Administración gallega contradice la que ofrecen los directores de las oficinas de empleo consultados por este periódico. Uno de ellos, por ejemplo, explica que «la clave 43 dice textualmente lo siguiente: se incluirán en este código aquellos demandantes para servicios externos al Inem o sin disponibilidad inmediata para ser enviados a ofertas de trabajo». Polémica En mayo del 2003, Jordi Sevilla, portavoz de Economía de PSOE acusó al Gobierno central de manipular las cifras del paro a través de la denominada clave 43. Entonces, el Inem respondió que los criterios para la medición del paro están regulados en una orden ministerial de 1985 y que, en todo ese tiempo, no han sido modificados: según el Gobierno central, el proceso informático de cierre de datos del paro registrado es automático y, en consecuencia, no manipulable. Los parados afectados por esta nueva circular advierten de que, en las llamadas telefónicas, no se realiza una oferta real de trabajo sino que se le pregunta al demandante si estaría disponible para un puesto de sus características. Muchos desempleados denuncian que, en la mayoría de los casos, lo que se oferta en realidad es un puesto en condiciones laborales muy precarias.