La mayoría estarán inoperativas julio y agosto, pero 43 seguirán en septiembre
25 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.El área sanitaria de Santiago y Barbanza mantendrá operativas este verano más del 91 % de las camas, lo que implica que casi el 9 % estarán cerradas o inoperativas. La gerencia del CHUS, no obstante, aclara que, como ocurre todos los años, en caso de ser necesarias se activarán inmediatamente las camas precisas. Habitualmente todos los hospitales llevan a cabo en verano una reorganización debido a varias causas, por un lado la actividad asistencial se reduce en verano y por otro el personal disfruta de sus períodos vacacionales, por lo que la programación quirúrgica también se adapta a esta situación.
Según la gerencia, el 91 % de las camas operativas es una cifra similar a la del verano del 2022. Dentro del área sanitaria el Hospital Clínico, el Hospital do Barbanza y el Psiquiátrico de Conxo no harán ninguna reorganización, manteniendo casi todas sus camas operativas. Únicamente en el primero de ellos se inactivan cunas de la unidad de lactantes, dieciocho.
El cierre de camas, por lo tanto, afectará casi exclusivamente al Hospital Provincial de Conxo, con 74 camas cerradas del bloque médico quirúrgico. Ana Riveiro, presidenta de la Xunta de Persoal y delegada de CC.OO., asegura que las 92 camas suponen una cifra muy similar a la del año pasado y lamenta esta política reiterada de todos los veranos: «Sempre rexeitamos o peche porque se pode aproveitar para reducir as listas de espera. Este ano pode haber problemas de persoal, pero outros anos non houbo e tamén se pecharon».
En cuanto a la duración de estos cierres, la mayoría de las habitaciones estarán inoperativas durante los meses de julio y agosto pero 43 camas, las de la unidad de traumatología del Provincial, no volverán a funcionar hasta el 16 de septiembre. En cuando al Gil Casares, solo está funcionando la planta de psiquiatría, que en principio se mantendrá.
Otra crítica vertida por los sindicatos es la falta de información, sin ningún documento escrito sobre el que hacer alegaciones, lamenta Xosé Manuel Marcote, de CIG-Saúde. Lo cierto es que la comunicación sobre la planificación del verano se ha reducido y cada vez se hace en fechas más próximas a julio, «modificando as condicións de traballo dos profesionais a estas alturas, o que é moi gravoso para eles», apunta Riveiro.
Obras y mantenimiento
El descenso de la actividad asistencial y el merecido descanso de los profesionales también es un buen momento para realizar obras en los hospitales. Desde el CHUS explican que se va a llevar a cabo una renovación integral de los cabeceros de las habitaciones de la segunda planta del Hospital de Conxo, en concreto de la parte izquierda, unas obras que se realizarán en julio y agosto, además de otras tareas de mantenimiento en habitaciones y baños. Estas mejoras permitirán modernizar las tomas a pie de cama de la red canalizada de oxígeno y vacío, así como actualizar el alumbrado y los enchufes eléctricos.
La gerencia alude al descenso de las patologías estacionales y las recaídas
Hay enfermedades cuya prevalencia se mantiene durante el verano pero otras, como son las patologías estacionales, bajan durante estos meses. También los ingresos hospitalarios por reagudizaciones de las enfermedades crónicas. Esto coincide con la necesidad del personal de disfrutar de sus vacaciones, por lo que en todas las áreas sanitarias se hacen ajustes en las próximas semanas, que dependen también de la zona ya que los comarcales reducen mucho sus actividad, algunos por debajo del 50 % tal y como explicó el conselleiro de Sanidade esta semana, mientras que en los hospitales más grandes la reducción es menor.