La zona ya comenzó a decir adiós al 2010

M. Garabantes

DEZA

31 dic 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

A Estrada anticipó ayer la despedida del 2010 con un concierto de Fin de Año protagonizado por la Coral Polifónica Estradense, la de Soutomaior y la Banda de Música Municipal de A Estrada. La primera parte del repertorio estuvo protagonizada por la zarzuela. Luisa Fernanda y La del manojo de rosas cosecharon sonoros aplausos. No obstante, la sorpresa del concierto fue el popurrí final de temas de ABBA encadenados, en homenaje a la mítica banda sueca de pop. Veintidós minutos de Fernando , Chiquitita y demás superéxitos hicieron revivir viejos tiempos a más de uno.

El cotillón para decir adiós al año ya llegó ayer a Silleda. Los primeros protagonistas fueron los más pequeños, los que tenían entre 4 y 12 años que vieron como en la Casa da Xuventude se organizaba una sesión especial de juegos para ellos y una merienda . El número de inscritos en esta actividad alcanzó los 125. Su fiesta terminaba en torno a las ocho de la tarde, hora en la que tomaban el relevo los mayores. El Ensaio de Aninovo de la Terceira Idade estuvo muy animado y no faltó el baile desde los primeros momentos. La asistencia sobrepasó las previsiones iniciales y se alcanzaron los 190 asistentes, para los que Servicios Sociais programó pinchos, baile, las uvas de la suerte y el champán. Por segundo año consecutivo, contaron también con la actuación del grupo de pandereteiras Son da Fervenza. En A Bandeira, misa de acción de gracias. Y también como es tradicional por las fiestas navideñas, A Bandeira acogió una misa de acción de gracias. El acto religioso tiene elementos distintivos, puesto que las ofrendas son presentadas por los grupos musicales y folclóricos. En esta ocasión, estaba prevista la asistencia de componentes de Xirandola, la banda de música de A Bandeira y dos músicos de Fornelos de Montes. Esta vez, el encargado de oficiar la misa fue el padre saletino natural de Angola, José Katanga, acompañado por Benito Otero Conde y José Espiño Matos. Al párroco angoleño, Juan Salgueiro, uno de los promotores de esta actividad, solicitó que diera la bienvenida a los asistentes en su idioma natal.