«El aplazamiento es la decisión más razonable»

P. ALONSO / P. penedo REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

ramon leiro

Gómez Noya, sin descartar Tokio, analizará con calma el nuevo escenario y Teresa Portela ya piensa en llegar a los 39 años al hito de sus sextos Juegos

25 mar 2020 . Actualizado a las 13:25 h.

Uno es el único pentacampeón Mundial de triatlón de la historia, y otra consiguió la plaza para ser la única mujer española en seis Juegos. Tanto para Javier Gómez Noya (Basilea, 1983), como para Teresa Portela (Cangas, 1982), el aplazamiento de los Juegos supone un revés, pero en plena extensión de la pandemia del coronavirus COVID-19 respaldan la medida como «la decisión más razonable, porque por encima de cualquier cuestión está la salud». A partir de ahí, Gómez Noya prefiere darse un tiempo para planificar el 2021, porque en principio ese sería el año de su regreso a la distancia ironman. «No descarto ni mucho menos los Juegos. Si podía fijarme ese objetivo en el 2020, por qué no en el 2021. Pero lo primero es ver cómo quedan los calendarios, los procesos de clasificación... Ya habrá tiempo de tomar una decisión. Pero, en todo caso, voy a seguir entrenándome a tope», reflexiona confinado en su vivienda familiar en Mourente, en Pontevedra, donde realiza gimnasia, corre sobre la cinta y saca brillo a la bicicleta en un rodillo.

Teresa Portela, en cambio, tiene claro que los Juegos del 2021 son desde ayer mismo su prioridad, como la de cualquier palista. «Yo estaba obcecada con trabajar para el 2020. Pero hay que resetear rápidamente, y volver a empezar. No puedes estar lamentándote por algo que ya pasó. Lo bueno es que ahora no tengo que rendir cuentas en cuatro meses sin poder entrenarme. Nosotros necesitábamos una certeza. No saber si se celebraban o no los Juegos nos generaba ansiedad. Ahora mi objetivo es el 2021», razona desde su domicilio en O Grove.

Después de que el COI se diese un plazo de cuatro semanas para resolver las fechas de Tokio, Gómez Noya también aplaude la certeza del aplazamiento al verano del 2021. «Ahora se rebajó la incertidumbre y las federaciones y los deportistas implicados pueden planificar el nuevo escenario».

Desde hoy con 37 años, Gómez Noya, plata en Londres 2012, deja el resto de incógnitas para más adelante. «Entreno lo mejor que puedo, aunque no pueda nadar, por razones obvias, y estoy a la espera de ver cómo se resuelve todo esto. Tenemos que entender que la pandemia pone a todo el planeta ante una situación desconocida», añade unas semanas después de regresar de Nueva Zelanda, donde comienza el confinamiento de la población y se encuentra su mujer, la también triatleta Annekke Jenkins.

El aplazamiento permite mantener una máxima olímpica, la de la igualdad de oportunidades en la preparación, pues atletas de varios países llevan confinados casi dos semanas, como recuerda Portela: «Si se hubiesen celebrado los Juegos en el 2020, serían unos Juegos en desigualdad, en los que no ganaría el mejor, sino el que hubiera podido entrenarse».