Usain Bolt afronta la primera de sus siete carreras para despedirse de Río convertido en leyenda
13 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Usain Bolt entra en acción. El más grande velocista de todos los tiempos comienza esta tarde, a partir de las cinco, su particular maratón para conseguir el objetivo de abandonar Río de Janeiro convertido en una leyenda. Para conseguirlo debe erigirse en el primer velocista que encadena tres triunfos consecutivos en otros tantos Juegos Olímpicos, y de paso, y si es posible, atacar el récord del mundo de los 200 metros, que él mismo posee desde el año 2009 en el Mundial de Berlín, ciudad en la que también dejó vigente la plusmarca del hectómetro.
Bolt fue de los primeros en llegar a Río, días antes de los Juegos para completar una preparación que estuvo en jaque por un inoportuno desgarro muscular a principios de julio. Todo se quedó en un susto después tras comprobar su recuperación en el único 200 de la temporada hasta el momento, en Londres.
Y recuperadas las buenas sensaciones, el icono del atletismo mundial se ha dejado ver por Río, para recordar que su objetivo es ganar la triple corona y confirmar que estos serán sus últimos Juegos, aunque su entrenador, el gurú Mills, ya comenzó su trabajo de zapa para convencerle de que aguante hasta Tokio. Difícil, porque para entonces tendría 34 años y las lesiones podrían comenzar a pasar factura.
Repetir el triunfo en los 100 metros se presenta como el primer, y seguramente más difícil reto, que le espera al jamaicano. Porque Justin Gatlin todavía tiene pendiente la revancha y llega mucho más rodado y con la mejor marca mundial del año (9,80 segundos). Trayvon Bromell y Jimmy Vicaut también han corrido más rápido que el jamaicano en este 2016 pero nadie compite como él. Yohan Blake, su compañero de entrenamientos, puede ser otra amenaza.
Para el 200 apenas se vislumbra un mortal que pueda salir de la curva a toda velocidad como hace el jamaicano de tallo largo sin descarrilar. Lashawn Merrit, con 19,74 segundos como mejor marca de la temporada, parece el rival a batir en una prueba en la que Bruno Hortelano intentará no ser invitado de excepción.
El camino hacia la leyenda acabará en el relevo 4x100, que será un día más tarde que la final del 200. Un maratón de resistencia para un velocista sin igual.