La Xunta prevé que la declaración sea efectiva antes de finalizar el año
25 abr 2011 . Actualizado a las 11:15 h.La tan esperada declaración de bien de interés cultural (BIC) del castro de Baroña, una de las joyas patrimoniales de Galicia que sufre un acusado deterioro y precisa de una intervención urgente, acaba de dar un primer paso. La Dirección Xeral do Patrimonio Cultural anunció ayer la aprobación de la resolución por la que se incoa el expediente para que el castro adquiera este nivel de protección, que en su caso lleva añadida la categoría de monumento. La resolución se publicará próximamente en el Diario Oficial de Galicia y se comunicará al Rexistro Xeral de Bens de Interese Cultural y al Concello de Porto do Son, municipio en el que se localiza el asentamiento. La Xunta prevé que la declaración sea efectiva antes de que finalice el año.
Para el conselleiro de Cultura e Turismo, Roberto Varela, esta decisión supone «un paso decisivo, xa que dende a súa publicación oficial vai garantir a máxima protección para o castro de Baroña, un dos vestixios da cultura castrexa mellor conservados de Galicia». En la actualidad, el antiguo poblado presenta unos graves problemas de deterioro que podrían agravarse si no se acomete una intervención urgente, según los expertos. Su ubicación frente al mar facilita la erosión, pero más perjudicial resulta la falta de control de los accesos y el comportamiento incívico de algunos visitantes, que contribuyen a degradar el castro. Xunta y Concello han polemizado sobre la necesidad de declarar Baroña bien de interés cultural y el dinero necesario para su conservación.
Zonas afectadas
El área afectada por la condición de monumento comprende todo el recinto castreño y todas las estructuras de delimitación que aíslan el poblado del restado de la península. Además, integra una zona en torno a su perímetro que puede albergar áreas de actividad relacionadas con el poblado. La delimitación de monumento comprende una parcela de titularidad pública y, en su zona este, cinco privadas.
Además, Baroña contará con un área de protección de unas cuarenta hectáreas, dividida en pequeñas parcelas, a excepción de la franja del litoral. Con la resolución se aplica de forma inmediata y provisional el régimen de protección previsto en la normativa de patrimonio cultural, que contempla la «suspensión das correspondentes licencias municipais de parcelación, edificación ou demolición nas zonas afectadas, así como os efectos das xa outorgadas», según la Xunta. Se abre también un período de información pública, que se prolongará un mes. Cultura también ha solicitado informes sobre la declaración a la Real Academia Galega, el Consello da Cultura y la Universidade de Santiago, que se pronunciarán en el plazo máximo de tres meses.